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Más de lo mismo/Del tintero

Fidencio Treviño Maldonado

Poco o nada les ha interesado el campo y los verdaderos campesinos a los once gobiernos que le precedieron a Don Lázaro Cárdenas del Río. Sin duda en cada acto campesino, las figuras y los preceptos de Emiliano Zapata y del Tata Cárdenas se izan como baluartes, después de ellos, todos los tratados, acuerdos y demás “aspirinas” son LETRA MUERTA y mera propaganda de ego para gobernantes y líderes en turno. Las reformas conciliatorias dirigidas para el sector más desprotegido tienen más preguntas que respuestas y sus programas, desgraciadamente están encaminados a un populismo enmarcado en la política al mercomenudeo del voto cautivo, que de mejoramiento para sus cultivos, producción y comercialización de sus productos y por añadidura un beneficio tangible de la economía rural, que tanto urge.

—-Con la firma del Acuerdo Nacional para el Campo, se terminan los focos rojos y las movilizaciones sociales, la indisciplina y manifestaciones de inconformidad- declara Javier Usabiaga, lo que nos da una idea del chatismo y obtuso pensamiento de los que nos gobiernan y, de seguir viendo a los campesinos como Dios a los conejos, es decir el multicitado Acuerdo se firma según Usabiaga (Sagarpa), para evitar embotellamientos, asaltos al Palacio Legislativo, toma de predios por luchas ancestrales en la tenencia de la tierra, cierre de puentes y carreteras y huelgas de hambre o gritos al presidente Fox y no va encaminado a cuando menos medio-remediar el rezago en todos los rubros que existen en el sector campesino y los habitantes de las zonas más marginadas. Desde el nacimiento de la nefasta mafia llamada CNC y que dicho sea de paso sólo se usó (usa) para llevar a sus caudillos y gamberros líderes a escalar escaños en la política nacional y convirtiendo a muchos sectores en meros productores del voto priista, el caso de la mayoría de los ejidos de La Laguna donde el campesino vivía del Banco Rural (Bandidal) y era carne de cañón en las elecciones en turno, amén que el dinero destinado para apoyos del campo siempre se utilizó en campañas políticas.

El rencor acumulado contra todo lo que oliera a Cárdenas y campesinos y con una mente maquiavélica, Carlos Salinas, orgullo e icono de los PRIistas, fue quien dio la estocada y puntilla al agro, primero se empecinó en hacer drásticos cambios al artículo 27 y la tierra, junto a la poca agua rodada y del subsuelo fue a dar a los latifundistas. Segundo al dar la firma del Tratado de Libre Comercio TLC, que si bien algunos sectores son beneficiados, la mayoría productores de frijol y maíz pronto verán las consecuencias.

No me cabe la menor duda que el Acuerdo Para el Campo sea visto por el presidente Fox con buenos ojos, pero también tengo mis interrogantes sobre si sólo es un programa lleno de buenas intenciones para el agro, un campo tan urgido en otros rubros con graves y grandes rezagos y donde las buenas intenciones no serán suficientes y más bien parece que las adecuaciones y adaptaciones se hacen con absoluta infidelidad, es decir el proyecto puede ser una antítesis más, en lo que de “por sí” nos tiene inmersos Fox y su gabinete.

La corrupción endémica que existe en todas las dependencias rurales son el mejor ejemplo, desde aquel banco de tristes recuerdos el Banrural, hasta la misma Procuraduría Agraria, con una inoperancia a todas luces, pasando por la CNA Comisión Nacional del Agua, prostituida al mejor postor, amén del fraude nunca revisado por parte de Conaza, Comisión Nacional de Zonas Áridas y qué decir de la Reforma Agraria, que gracias a su burocracia y sus desaseos, causa hasta nuestros días enfrentamientos por la tenencia de la tierra con resultados catastróficos. Lo mejor del tan mentado y multicitado Acuerdo Para el Campo fue que ahora sí, todos los líderes parecían niños en un almuerzo de cualquier orfanato. Antes sólo la CNC ocupaba el puesto en el presidium y eran sus líderes en turno quienes no admitían otra organización, basta recordar a Silerio Esparza, Beatriz Paredes, Hugo Olivares Ventura y el último Heladio Ramírez que ahora tuvo que firmar el acuerdo junto a otros líderes que se dicen de la izquierda y ultra derecha y media, etc., El Campo No Aguanta Más, la Central Campesina Independiente, El Barzón, Campesinos Independientes, etc. que “parecen” NO ser oficiales corporativistas como aún lo es la corrupta organización CNC. En fin, ahora sí están rasadas estas organizaciones y parejitos como en la danza bailarán al son que les toque la firma del Acuerdo Para el Campo.

El gobierno en turno siempre hace los acuerdos pensando lo que a ellos les conviene y nunca por el bienestar social a los que van dirigidos estos programas (mil tratados y acuerdos os contemplan), es decir mientras los verdaderos campesinos son ENTENADOS del gobierno, los líderes y funcionarios y recuas que los acompañan son HIJOS del gobierno e invitados en el desarrollo de estos acuerdos.

Pues esperemos que este acuerdo no sea otra sentencia fiel y brutal para los campesinos y que atienda los “focos rojos” como dice Javier Usabiaga, porque como andan las cosas puede arder como la nafta. Sin duda el tiempo nos dará la razón, como nos la está dando en el Acuerdo Nacional sobre la Educación, aquel tratado donde hasta Elba Ester Gordillo, líder moral de los pobresores firmó. Anterior a este acuerdo están otras preguntas ¿Y el diesel a mitad de precio para los campiranos dónde quedó...?, ¿Que pasó con la tarifa de la CFE dirigida al campo?, ¿Por qué la lana de Procampo llega tarde? ¡Aclarando! cuando llega... Correo e-linga__1031@hotmail.com

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