Salzburgo (Austria)(EFE).- Un nuevo método para reconstruir con células propias del paciente huesos craneales lesionados ha empezado a aplicarse en Salzburgo, según comunicó un equipo de otorrinolaringólogos de esta ciudad.
Los especialistas encabezados por Gerhard Oberascher, que cooperan con un instituto dedicado a la reconstrucción de tejidos y órganos, han cultivado células extraídas del tejido del paciente y producido de éstas una tapa, blanda al principio, que se convierte en una cubierta ósea dura al cabo de un año.
Pero quedaba por resolver un problema originado porque la cubierta blanda que cubre el cráneo después de la operación se deslizaba hacia el interior del cráneo y deformaba la cabeza.
Ahora, los médicos han conseguido dar más estabilidad a esa cubierta mediante unas láminas especiales ajustadas a un modelo muy preciso del cráneo.
El nuevo método se ha aplicado a una mujer de 50 años que, al patinar sobre ruedas, sufrió un accidente del que resultó gravemente lesionada en el cráneo y el cerebro.
Para quitar las láminas especiales de la cabeza no es necesaria una segunda intervención, porque éstas se destruyen por sí mismas después de un año, mientras el material implantado se convierte en un hueso vivo y firme, aseguran los médicos.