Reuters
Washington, EU.- Los últimos datos sobre la evolución de la economía de Estados Unidos mostraron ayer que la tasa de desempleo bajó por primera vez en más de un año, la actividad industrial aceleró el ritmo y el humor de los consumidores mejoró, todas señales alentadoras.
Pero las compañías estadounidenses volvieron a reducir sus plantillas de trabajadores por sexto mes consecutivo, dijo el gobierno en un informe que ofreció una nota de cautela sobre la marcha de la recuperación de la mayor economía mundial, y que provocó bajas en la bolsa.
La tasa de desempleo descendió el mes pasado a 6.2 por ciento, desde 6.4 por ciento en junio, dijo el Departamento de Trabajo. Sin embargo, el declive se debió a un éxodo de buscadores de empleo de la fuerza laboral, no a un aumento de las contrataciones.
La cifra de trabajadores en las plantillas de las empresas de Estados Unidos disminuyó en 44,000, una cifra que contrastó con las previsiones de los analistas, de un aumento de 18,000.
"Creo que es un poco decepcionante", dijo Jay Bryson, economista de Wachovia Securities en Charlotte, Carolina del Norte. "No estamos generando crecimiento del empleo en la manufactura y es ahí donde la pérdida de empleos estuvo concentrada".
Por otra parte, el índice de la confianza del consumidor de la Universidad de Michigan subió a 90.9 en julio, desde la cifra de 89.7 en junio, dijeron ayer fuentes del mercado.
La lectura de mediados de mes para julio había arrojado una cifra de 90.3. Según un sondeo de una agencia de noticias internacionales, Wall Street había proyectado una medición de 90.5 para la última lectura.
Por separado, un indicador de la actividad industrial estadounidense, que el mercado sigue de cerca, mostró que el sector se recuperó en julio después de cuatro meses de contracción.
El Instituto de Gerencia de Abastecimiento (ISM por su sigla en inglés) dijo que su índice manufacturero subió a 51.8 en julio, en línea con las estimaciones de los economistas, y por encima de la lectura de 49.8 de junio.
Las lecturas superiores a 50 de este índice reflejan expansión del sector industrial, que representa un sexta parte de la actividad económica de Estados Unidos y que se vio fuertemente afectado por la recesión y la lenta recuperación de los últimos años.
Incluso a pesar de que el mercado laboral atraviesa por su tercer año de debilidad, los ingresos de los estadounidenses se han mantenido firmes, una de las razones por las que los economistas siguen optimistas.
Ayer, un informe del Departamento de Comercio mostró que los ingresos personales en Estados Unidos subieron un saludable 0.3 por ciento en junio, y que el gasto del consumidor creció con la misma intensidad.