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México, DF.- Aunque al cierre de 2003 los pronósticos indican una modesta recuperación de 1.5 por ciento tras la caída de 0.6 por ciento en 2002, al término del año América Latina cumplirá ?el sexenio perdido? en cuanto a crecimiento económico, consideró el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP). En su estudio ?Panorama de la economía latinoamericana. Débil crecimiento en la región?, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado señala que el Producto Interno Bruto (PIB) por habitante se mantendrá estancado este año en un dos por ciento, por debajo del nivel de 1997.
Sostiene además que el comportamiento de los fundamentales de las economías de la región ?no dan certidumbre a los organismos internacionales?. Pese a este contexto, México disminuyó 15 puntos el riesgo soberano o riesgo país al cierre de octubre, mientras que su crecimiento económico en 2003 se estima en 1.9 por ciento y para el siguiente año un fuerte repunte de 3.8 por ciento.
Sin embargo, el organismo recordó que México lleva dos años de estancamiento y precisa reformas estructurales para continuar el avance. En el primer trimestre del año el crecimiento fue de 2.3 por ciento, y en el segundo de 0.3 del PIB, mientras las tasas de interés se encuentran bajas a niveles históricos y para los Cetes a 28 días los pronósticos indican que cerrará el años en alrededor de 6.38 puntos. Aclara que la inflación en México está convergiendo a los niveles de sus socios del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), con lo cual se espera llegue a un nivel de 3.55 por ciento para el presente año y de 3.16 por ciento para 2004.
Para el organismo, dependiente del Consejo Coordinador Empresarial, ?Uno de los artífices en esta baja de la inflación ha sido el manejo adecuado de la tasa del tipo de cambio?.
Advierte que las políticas de control de la inflación no han sido acompañadas de crecimiento económico y empleo sustancial, por lo que la economía mexicana ha estado estancada durante 2002 y parte de 2003.
Reconoce signos de mejora en el corto plazo, principalmente por variables como el consumo interno y el incremento de la demanda externa gracias a la recuperación económica mundial. La correlación entre el sector manufacturero de los Estados Unidos y el de México hace que aún cuando ha habido mejoría en su sector, ésta repercutirá con cierto rezago en México, y en este rubro recordó que construcción y minería son los sectores con un comportamiento fuerte.
Las autoridades han tomado ventaja de las bajas tasas de interés internacional, reacomodando la deuda externa con tasas menores a las pactadas, por lo que la deuda externa se calcula en unos 78.8 mil millones de dólares, esto es, 12.5 por ciento del PIB. ?Las instituciones internacionales como son el Fondo Monetario Internacional (FMI), Banco Mundial y Banco Interamericano de Desarrollo han hecho hincapié en la necesidad de realizar las reformas estructurales con el fin de mejorar la competitividad y disminuir la dependencia del financiamiento internacional. De llevarse a cabo, se lograrían tener tasas de crecimiento económico mayores a las que se están registrando actualmente?.
Explicó que lugares como Argentina ofrecen al Fondo Monetario Internacional pagar su deuda a razón de 25 centavos por dólar, negociaciones que llevan más de dos años sin lograr un acuerdo definitivo.
En otros países, como Venezuela, el manejo inadecuado tanto interno como externo de las políticas sólo generan mayores niveles de incertidumbre, golpeando aún más la economía, mientras que Chile sigue siendo por mucho el país con mejores resultados en la región.
Colombia, agrega, ha recibido espaldarazo de Estados Unidos en su combate contra el narcotráfico, lo que ha servido para recibir ayuda financiera. Brasil, por su parte da muestras de liderazgo en la región gracias a las propuestas que ha realizado el presidente Lula Da Silva, y que han permitido fortalecer el país a nivel internacional, aunque estas expectativas aún no se traducen en el desempeño de la economía.