BUENOS AIRES, ARGENTINA.- México es el país donde juega el mayor número de futbolistas argentinos en el extranjero, con un total de 46 en Primera División y 23 en el ascenso, afirmó ayer el diario Clarín.
Indicó que las ofertas del futbol mexicano "son definitivamente las más tentadoras del mercado americano y que, varias veces, en lo económico supera al europeo".
Con 46 jugadores argentinos en sus equipos de Primera División, México tiene un futbolista más nacido en este país que la Liga española y 22 más que la italiana, pese a que esos países solían ser el destino natural de los deportistas sudamericanos.
"El fenómeno no es nuevo, pero se incrementó notoriamente en los últimos años: desde 1990 hasta el torneo que terminó hace dos meses, 188 argentinos pasaron por la liga mayor de México", precisó la fuente.
Los fenómenos futbolísticos, como el ex delantero de River Plate Andrés D’Alessandro (hoy en el Wolfsburgo de Alemania) o el ex jugador de Independiente Gabriel Milito (del Zaragoza de España), "lógicamente van directo a Europa", apuntó el medio de comunicación.
"Pero el resto de los futbolistas argentinos encuentra a México como una excelente opción. Cobran mucho dinero, lo reciben al día, y viven y trabajan relajados ya que se trata de una competencia tranquila, sin presiones ni histerias", destacó.
Agregó que en el receso de este verano, previo a la reanudación de los torneos, los mexicanos "multiplicaron su apuesta" y ya contrataron a varios exponentes de la élite del futbol argentino.
Entre las contrataciones mencionó la del goleador de Boca Juniors Marcelo Delgado y la del ex jugador de Central, César Delgado, quienes pasaron a Cruz Azul, en tanto que "la estrella" de Independiente, Andrés Silvera, se incorporó a Tigres que será dirigido por el argentino Nery Pumpido.
En la lista también están Ariel Garcé, quien de River Plate se fue a Morelia; Alfredo Moreno de Boca Juniors a Necaxa; Gustavo Campagnulo de Racing a Tigres; Daniel Díaz de Central a Cruz Azul, y Walter Jiménez de Banfield a Veracruz.
Según Clarín, el caso de Fabricio Fuentes, el ex capitán de Vélez Sarsfield, sintetiza la manera en la que México se convirtió en una plaza muy fuerte.
Fuentes llegó a Querétaro a cambio de un millón 200 mil dólares, sólo jugó un amistoso y el viernes pasado fue transferido al Guingamp de Francia en dos millones de dólares.
México, además, importa futbolistas del ascenso argentino, como José Tabares, que de Comodoro Rivadavia saltó al Necaxa.
Hace cuatro años, también desde la Segunda División argentina, Mauro Camoranesi, entonces en Banfield, pasó a Cruz Azul para después nacionalizarse italiano e integrarse a la selección azurra.
Algo parecido pasó con Gabriel Caballero, que desde el cuadro Central Córdoba llegó a México, se nacionalizó y jugó el Mundial 2002 para el equipo de ese país.
En el futbol mexicano también los técnicos tienen una gran participación, entre las que este año destacó Daniel Passarella, quien junto con los argentinos Guillermo Franco, Walter Erviti y Pablo Rotchen se consagró campeón con Monterrey.
Otros entrenadores argentinos que están en México son Rubén Romano de Monarcas; Alberto Jorge de Toluca; Alberto Brailovsky de Veracruz; Mario Sanabria de Querétaro; Carlos Trucco de Celaya, y Salvador Capitano en Chiapas.
Caso aparte es el director técnico de la selección mexicana, el argentino Ricardo La Volpe.
Clarín advirtió que no debe soslayarse que, antes de ser el técnico de la selección argentina, Marcelo Bielsa trabajó en México con Atlas y con América.
Desde el "boom" económico de los años 80s, cuando las empresas compraron varios clubes mexicanos, en la elección de extranjeros siempre se priorizó a los argentinos por encima de los brasileños ya que sólo hay 18 jugadores de esa nacionalidad en México.