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MÉXICO, DF.- La secretaria general del Consejo Nacional de Población (Conapo), Elena Zúñiga Herrera, asevera que el flujo migratorio a Estados Unidos sigue creciendo y está fuera de control y se manifiesta con una fuerza que no se puede detener.
Aunque en el vecino país del norte se multipliquen los presupuestos para la seguridad fronteriza, debe admitirse que no ha habido maneras efectivas para detener el paso de mexicanos en busca de trabajo, señala.
Y es que las causas del fenómeno migratorio están en ambos países y entonces es en ambas economías en las que se deben encontrar las respuestas “sensatas y coordinadas”.
Elena Zúñiga Herrera comenta que es cada vez más complejo el fenómeno migratorio, que ha alcanzado dimensiones que no pudieron imaginarse hace años.
Lo que pasa ahora en ambos lados de la frontera, sólo puede ser resuelto con un acuerdo migratorio. Sólo así se reducirían los costos, altos y penosos, que se llegan a pagar ahora.
Lamenta que haya un millón de cruces de mexicanos, cada año y que de ellos 400 mil se queden en Estados Unidos. Se trata de gente joven en aptitud para el trabajo que deja sus regiones, donde su aporte hace falta, pues cada vez son más las localidades de sólo mujeres.
“La gente que México pierde por el fenómeno de la migración, tiene edades de 15 a 44 años de edad, en su mayoría y la mayor parte de ellos son de Michoacán, Guanajuato, Zacatecas y Jalisco”, considera.
Replica al embajador Antonio Garza, que ha calificado a su país como “compasivo” con los mexicanos. Los trabajadores indocumentados dejan una gran riqueza en el país del norte, dice la funcionaria de la Secretaría de Gobernación.
Señala que si bien a México vienen más de 12 mil millones de dólares en remesas, de acuerdo con las estimaciones para el 2003, en Estados Unidos se queda una riqueza mucho mayor, generada por manos mexicanas.
La aportación laboral de los mexicanos es fundamental para la economía de Estados Unidos, subrayó Zúñiga Herrera. Además que diversos sectores productivos de la Unión Americana son factores de atracción de migrantes.
Y expone que la mayor parte de los recursos que obtienen los trabajadores mexicanos se quedan en Estados Unidos, y el envío de recursos a sus familias es menor.