MÉXICO D.F.- A casi tres décadas de su fallecimiento, el autor mexicano José Alfredo Jiménez cantará su popular tema ranchero “El Rey” a dueto con el roquero argentino Miguel Mateos. Y como si fuera poco, a ritmo de blues. Gracias a la tecnología, Mateos rescató la voz de Jiménez para hacer una nueva versión de la canción, que será plasmada en un disco homenaje al famoso compositor mexicano en el que también participan artistas como el español Joaquín Sabina, los colombianos de Aterciopelados y la costarricense Chavela Vargas.
“Hice una especie de blues-gospel porque tiene esa estructura. Los acordes parecen de blues, parece mentira, es una ranchera”, dijo Mateos en una entrevista.
“Cada primera línea de los versos la introduce José Alfredo. Parece mentira: cantando él un blues”, agregó.
Mateos, que se hizo famoso en Latinoamérica con canciones como “Tirá Para Arriba”, “Un Poco de Satisfacción” o “Cuando Seas Grande” en la década de 1980, dará un recital en la Ciudad de México, donde no ha tocado en seis años.
Atrapado en los ochenta
A dos décadas de haber iniciado su carrera musical con el grupo de rock Zas, Mateos asegura seguir siendo el mismo, impermeable a las influencias de nuevos sonidos electrónicos.
“Mi nuevo disco es más sanguíneo, más crudo, más guitarra y piano. Voy a tocar hasta un contrabajo, piano y batería solamente, sin amplificar, acústicas nada más. Esto se llama ‘Salir vivo’ y las máquinas no están vivas”, dijo Mateos aludiendo a su disco más reciente.
Esa producción, una recopilación de éxitos lanzada a fines del 2002, será presentada el jueves en la capital mexicana.
El repertorio incluirá los viejos éxitos, como “Es Tan Fácil Romper un Corazón” y “Mi Sombra en la Pared”, y algunos de los temas inéditos que contiene “Salir Vivo”.
Mateos espera un buen recibimiento de parte de sus seguidores mexicanos, que se quedaron con ganas de verlo hace un mes cuando un concierto fue pospuesto por una lesión que sufrió el roquero en la pierna izquierda durante otro recital.
“Tengo ese raro privilegio de ser por lo menos escuchado con respeto, lo nuevo y lo anterior... Eso me permite seguir desafiando esquemas y es en definitiva lo que voy a seguir haciendo toda mi vida”, dijo el músico.
Mateos dejará México para volver a Argentina en agosto y preparar una gira a Colombia, Perú y Chile. Además, dijo, continuará en el proceso de selección de 20 canciones para un nuevo disco que será lanzado a fin de año.
Admirador de los grupos mexicanos Jaguares, Café Tacuba y Molotov, Mateos hizo referencia a los “reality” musicales y destacó que un ídolo no se hace en la televisión, pero también confió en que el tiempo decidirá el futuro de cada uno de los novatos.
Miguel Mateos asegura que aún le falta mucho camino por recorrer y evocando las frases de un tema de la agrupación “Los Ramones” sostiene: “mi futuro es tan brillante que tengo que usar anteojos de sol”.
“Soy un performance y tengo varias motivaciones, he aprendido a disfrutar los momentos más chiquitos de mi vida y los atesoro como nadie, porque la vida es tan breve que lo que más vale son las cosas pequeñas.
“No me gusta involucrarme en mega proyectos o sueños porque trato de vivir todos los días y me levanto con el corazón abierto pensando en lo padre que es la vida”, sostiene. Miguel Mateos, quien ha compartido escenarios y tiempos de éxito con músicos y grupos como Los Caifanes, Ritmo Peligroso, Kenny y Los Eléctricos, Soda Stereo, Charly García y Fito Páez, inició su carrera meteórica con el álbum “Zas”, de 1982. A este le siguen “Huevos” (1983), “Tengo que Parar” (1984), “Rocas Vivas”, (en vivo, 1985), “Mensajes en la Radio” (1986), “Solos en América Uno y Dos” (disco doble, 1986), “Atado a un Sentimiento” (1987), todos estos grabados con el grupo Zas.
Como solista ha grabado “Obsesión” (1990), “Kryptonita” (1991), “Coctel” (en vivo, 1993), “Pisanlov” (1996), “Bar Imperio” (1998) y “Salir vivo” (disco doble, 2002).