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Jerusalén.- Yasser Arafat criticó ayer duramente los resultados de la cumbre tripartita de Aqaba y acusó al primer ministro israelí de no haber hecho ninguna oferta “tangible”. El presidente palestino aseguró que las promesas de Ariel Sharon de desmantelar ciertos enclaves ilegales de colonos en Cisjordania no constituyen una concesión significativa.
“Desafortunadamente Sharon aún no ha ofrecido nada concreto”, dijo ayer en voz alta el presidente a la prensa en las puertas de la Mokata de Ramala, pocos minutos después de haber recibido en su despacho un alto representante de la UNICEF.
Arafat minimizó irónicamente uno de los pocos compromisos concretos anunciados por los israelíes en la cumbre de Aqaba, ante el presidente de Estados Unidos: empezar de inmediato el desmantelamiento de los asentamientos irregulares, construidos durante los tres últimos años, sin autorización oficial, con la intención de ser el germen o el embrión de nuevas colonias.
Las críticas de Arafat hacia la cumbre de Aqaba ponen también de manifiesto el resentimiento que el líder ha ido acumulado en los últimos días, al haber sido por primera vez en la historia moderna de la resistencia palestina relegado a un segundo plano y sustituido en un acto oficial por el nuevo primer ministro Mahmoud Abbas (Abu Mazen). Los seguidores y simpatizantes de Arafat, conscientes de este sentimiento de frustración y marginación al que se encuentra sometido su jefe, salieron ayer en manifestación por las calles de Gaza, para aclamar a su líder. Algunos de los manifestantes desfilaron llevando en sus manos armas, en un claro desafió hacia su jefe de Gobierno que ha anunciado su intención de desactivar la Intifada, convirtiéndola en un movimiento pacífico.
En tanto, se informó de la celebración del tercer encuentro entre Sharon y Abbas, quien dará cuenta a su homólogo israelí de los primeros pasos adoptados para combatir las actividades rebeldes, lo que constituyó la víspera uno de sus principales compromisos.
Asimismo oficiales de seguridad israelíes y palestinos sostendrán una serie de reuniones en los próximos días, que culminarán con el encuentro entre el titular israelí de Defensa Shaul Mofaz y Mohammed Dahlan, ministro palestino de Asuntos Internos.
Por su parte, el portavoz de la oficina de Sharon, Avi Pazner, señaló ayer que el desmantelamiento de los asentamientos judíos es una cuestión secundaria y subrayó que tampoco se planea el desmantelamiento de todas las construcciones erigidas por israelíes.
“La cuestión del desmantelamiento de las colonias es totalmente secundaria”, indicó Pazner, quien enfatizó que el presidente George W. Bush durante su discurso dijo que ese asunto “debe abordarse”, “no dijo que Israel debe sacar o destruir todo lo que hizo”.
En otro hecho, la prensa israelí reiteró sus acusaciones contra Arafat, quien presuntamente impide a Abbas ejercer sus funciones, al asegurar que el primer ministro palestino mantuvo comunicación con el líder de la ANP durante toda la reunión celebrada la víspera.