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Lima, PERÚ.- A dos se elevó el número de muertos por heridas de bala durante enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas del orden en la ciudad de Puno, en el segundo día de vigencia del estado de emergencia en Perú, confirmó Issac Manzaneda, director del hospital regional de esa ciudad.
El médico dijo que las muertes se produjeron por perforaciones de bala que recibieron en el abdomen y en el tórax los estudiantes Tedy Quilca Cruz y Omar Saravia Quispe, respectivamente.
Los fallecimientos se produjeron en violentos enfrentamientos que estallaron en las cercanías de la Universidad del Altiplano, en Puno, mil 200 kilómetros al sudeste de Lima, donde efectivos policiales y soldados dispararon contra los estudiantes que se concentraban en el local universitario, relataron estudiantes a radioemisoras de Lima.
Las protestas dejaron también 23 heridos durante el enfrentamiento, informó el Fiscal Superior de Prevención del Delito, Manuel Torres Quispe.
El funcionario dijo a periodistas que teme un desborde de los ánimos en Puno, región fronteriza con Bolivia, lo cual podría generar nuevos choques entre los manifestantes y las fuerzas del orden en plena vigencia del estado de emergencia decretado el pasado martes.
Los miembros de las Fuerzas Armadas repelieron ayer la protesta estudiantil e intentaron retomar el control de la Universidad del Altiplano de Puno, la cual está ocupada por los estudiantes.
Autoridades académicas indicaron que la situación al interior de la Universidad del Altiplano de Puno es un “caos” y advirtieron que podría pasar a mayores “si las autoridades no se tranquilizan y dejan de atropellar a los estudiantes”.
Reportes radiales informaron, por otra parte, que en la norteña ciudad de Trujillo los maestros salieron a las calles para protestar por la radical medida gubernamental y que chocaron con las fuerzas del orden con un saldo de varios educadores golpeados.
En el norteño puerto de Chimbote, mientras, los miembros de la Marina de Guerra del Perú hicieron uso de bombas lacrimógenas para dispersar una manifestación en el centro de esa ciudad.
El comandante de la Armada peruana en el puerto de Chimbote, Gerardo Paccioni Noriega, ordenó sofocar, según fuentes consultadas, cualquier enfrentamiento y reprimir a los profesores que se lanzaron a las calles.
El secretario general de la Confederación General de Trabajadores del Perú, (CGTP), Juan José Gorriti, expresó por su parte su preocupación por la declaratoria de emergencia dispuesta por el gobierno el pasado martes, medida que a su juicio fue innecesaria.
“Estos problemas no son de ahora tienen mucho tiempo y se ha tenido que acudir a la represión para bloquear la protesta popular”, manifestó el dirigente de la agrupación que reúne a unos 500 mil trabajadores peruanos.