Reuters
CARACAS, Venezuela.- Dos presuntos paramilitares colombianos murieron en un enfrentamiento con la policía venezolana durante una operación en la zona fronteriza, informaron ayer las autoridades de Venezuela.
La operación se llevó a cabo tras acusaciones por parte de Colombia de que el gobierno del presidente Hugo Chávez no estaba haciendo lo suficiente para garantizar la seguridad en la frontera común de 2,219 kilómetros, donde actúan grupos rebeldes y paramilitares.
Un portavoz policial en el suroccidental estado Táchira dijo que se presumía que los dos hombres abatidos el lunes eran miembros de las ilegales Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
Los supuestos paramilitares formaban parte de un grupo de ocho hombres que viajaban en un vehículo y abrió fuego contra una patrulla en una carretera en las afueras de Ureña, cerca del poblado fronterizo de San Antonio. El resto logró huir hacia Colombia.
El incidente siguió a la captura a tempranas horas del domingo de tres miembros del rebelde Ejército de Liberación Nacional (ELN) en la localidad de San Antonio. El ELN es uno de los grupos guerrilleros en el conflicto de cuatro décadas en Colombia.
El portavoz policial dijo que la captura fue resultado de una acción conjunta de las policías de ambos países. “Estamos intercambiando inteligencia e información”, dijo.
Chávez ha negado repetidamente las acusaciones del gobierno y militares colombianos de que los rebeldes del vecino país tienen bases en territorio venezolano. El mandatario y sus comandantes militares han dicho que combatirán cualquier campamento guerrillero en el país.
La policía dijo que los tres rebeldes capturados eran miembros de una facción del ELN, sospechosos de hacer estallar una bomba a inicios de mes.
en la fronteriza localidad de Cúcuta, que mató más de diez personas e hirió a decenas más.