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FRANJA DE GAZA.- Israel realizó su incursión más profunda en la Ciudad de Gaza en 28 meses de enfrentamientos con los palestinos, dando municiones a las promesas de seguridad del primer ministro Ariel Sharon, dos días antes de las elecciones generales israelíes.
Según testigos, decenas de vehículos blindados, respaldados por helicópteros lanzando mísiles entraron en el vecindario Zaitoun de la ciudad, bastión del grupo militante islámico Hamas, que ha realizado numerosos ataques suicidas.
Al menos seis palestinos murieron, tres por un misil disparado desde el aire, y decenas resultaron heridos, dijeron autoridades de hospitales. Una fuente militar israelí dijo que las tropas fueron atacadas por hombres armados con rifles de asalto, explosivos y mísiles anti tanques.
Fuerzas israelíes llegaron a 100 metros de la Plaza Palestina, en la incursión más profunda en la densamente poblada Ciudad de Gaza desde que comenzó la rebelión en aras de un estado palestino, en septiembre del 2000.
Los soldados allanaron varios edificios y francotiradores se apostaron en los techos, mientras balas trazadoras iluminaban el cielo nocturno y se escuchaban llamados desde las mezquitas para que los palestinos armados se enfrentaran a los israelíes, dijeron testigos.
“Cada hombre con un arma debe correr a las calles y defender el honor palestino”, gritaban los altavoces en medio de fuertes explosiones.
Los soldados volaron en pedazos la casa de un militante de Hamas muerto durante un ataque a un asentamiento judío en la Franja de Gaza, hace varios meses, indicaron testigos.
“Estábamos durmiendo, de pronto el suelo comenzó a temblar. Vi un tanque y me quedé en mi lugar, paralizado”, relató Ahmed Nemer, un residente de Zaitoun.
“Nos apretamos en una habitación y esperamos por la piedad de Dios. Pudimos escuchar a los soldados gritándole a los vecinos que abrieran las puertas y salieran”, dijo.
Sharon ha convertido una enérgica acción militar contra los radicales palestinos en la base de su campaña electoral, y prometió no negociar la paz hasta que no termine la violencia contra los israelíes.
Encuestas de opinión mostraban que su derechista partido Likud ganaría las elecciones del martes.
“El primer ministro Sharon está decidido a terminar su campaña electoral con más sangre palestina y con más destrucción y más agresión y escalada (de la violencia)”, dijo el ministro palestino Saeb Erekat.
El incremento de la violencia se produce en medio de conversaciones entre facciones palestinas en El Cairo sobre una propuesta egipcia para un cese del fuego unilateral de un año.
El sábado, fuerzas israelíes dinamitaron cuatro puentes en el pueblo de Beit Hanoun, en el norte de Gaza, cortando las comunicaciones con la Ciudad de Gaza, después que cinco mísiles disparados desde el área cayeron en un sureño pueblo israelí, cerca del rancho de Sharon, aunque no causaron heridas graves.
La propuesta egipcia de un cese del fuego fue planteada en un documento que también defiende el derecho a resistir a la ocupación israelí y a mantener a Yasser Arafat como presidente palestino.
Un funcionario palestino dijo que los grupos —que van desde la facción Fatah hasta facciones islámicas y marxistas— querían condicionar la propuesta egipcia al compromiso israelí a poner fin a la violencia.
“Una de las sugerencias que Egipto presenta es mantener el acuerdo (de tregua) como un depósito con los egipcios hasta que Israel ofrezca serios compromisos y garantías (para poner fin a su ofensiva militar)”, dijo.
El funcionario, quien pidió no ser identificado, señaló que una propuesta condicionada podría ser adoptada por las facciones al finalizar las conversaciones, junto con un compromiso de trabajar hacia una estrategia palestina unificada.
El acuerdo de un cese del fuego unilateral de un año parece una meta distante. Varias organizaciones, como los grupos radicales Hamas y Yihad Islámica rechazaron esa opción incluso antes de que comenzaran las conversaciones, y sólo Fatah ha aceptado la idea hasta ahora.
Al menos mil 794 palestinos y 698 israelíes han muerto desde que comenzó la rebelión, en septiembre del 2000, tras el estancamiento de las conversaciones de paz.