07 octubre 2003
BAGDAD, (Reuters) - Tres soldados estadounidenses y un traductor iraquí murieron y otros dos soldados resultaron heridos en ataques con bombas perpetrados en Bagdad, informó el martes el ejército de Estados Unidos.
En un ataque con bomba realizado el lunes en el sur de la capital iraquí murieron dos de los soldados y otros dos sufrieron heridas, según el Comando Central del ejército. Junto con ellos también perdió la vida el iraquí que les hacía de traductor.
Previamente, el ejército había informado de otro ataque, ocurrido el lunes también, en el oeste de Bagdad, en el que otro soldado murió y otro resultó herido.
El ejército dijo que ambos eran del 3er. Regimiento de Caballería y que el ataque se realizó con bombas de fabricación casera.
Pocas horas después, desconocidos atacaron con una bomba la sede de la cancillería iraquí y se escucharon disparos en la zona, pero el ejército estadounidense dijo que no hubo bajas.
"Hubo una explosión en el jardín del ministerio de Relaciones Exteriores", dijo el teniente coronel Randy Lane.
"No está claro si fue una granada propulsada por cohete o un mortero... no hubo víctimas, sólo algunas ventanas rotas. El ministro no se encontraba en el edificio en ese momento", agregó.
El abogado Aymen Khalid dijo que estaba a punto de ir a la principal entrada en el gran complejo cuando escuchó la explosión.
"Vi una bola de fuego", dijo. "Los empleados de la cancillería salieron corriendo del edificio para la calle para evacuar el complejo después del ataque. No vi muertos ni a personas heridas saliendo" del edificio.
El teniente coronel Lane dijo que hubo algunos disparos de armas livianas durante cerca de un minuto después de la explosión en la cancillería, pero agregó que no estaba claro si los dos incidentes estaban vinculados.
"Pareció ser de iraquíes contra iraquíes, pues no hubo fuerzas presentes cuando ocurrió la explosión", dijo.
Varios ataques con bombas y misiles han estado dirigidos a "blancos vulnerables" en Bagdad en las últimas semanas.
El mes pasado, un suicida se inmoló en un vehículo frente a la sede de las Naciones Unidas en Bagdad, matando también a un guardia de seguridad, en el segundo atentado con bomba mortal contra la ONU en la capital iraquí.
Una bomba también mató recientemente a un guardia de seguridad en un hotel utilizado por la cadena de televisión estadounidense NBC y se dispararon proyectiles contra el Hotel Rasheed, donde se aloja destacado personal de la administración dirigida por Estados Unidos.
Washington acusa de los ataques a seguidores de Saddam Hussein, derrocado en abril en una invasión liderada por Estados Unidos, y a extremistas musulmanes extranjeros.
Un atentado realizado el 19 de agosto contra la sede de la ONU en Bagdad mató a 22 personas, como parte de la continua violencia que ha obstaculizado los esfuerzos estadounidenses por ampliar la participación internacional en la reconstrucción y labores de paz de posguerra.