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Washington, EU.- El gobierno de Estados Unidos reiteró ayer su temor sobre la muralla que Israel construye en Cisjordania, y señaló que discute con Tel Aviv problemas que han sido detectados con las fases subsecuentes del controvertido proyecto.
El secretario de Estado, Colin Powell, afirmó que el gobierno del presidente George W. Bush no ha tomado aún decisión alguna respecto de los nueve mil millones de dólares en garantías de préstamos aprobados por el Congreso a favor del gobierno israelí.
“No hemos tomado ninguna decisión aún... pero tenemos que ser fieles a las direcciones del Congreso sobre cómo usar el dinero de estas garantías de préstamos”, dijo Powell ante periodistas en el Club de Prensa Extranjera.
Algunas versiones habían indicado en días recientes que el gobierno de Bush consideraba congelar algunas garantías de préstamos, como presión para que el gobierno de Ariel Sharon detuviera la construcción del muro.
Powell señaló que aunque Estados Unidos entendía las razones de Israel para levantar la muralla, las diferencias tenían que ver con su ubicación y con el impacto en la vida diaria de los palestinos.
“Cuando la valla empieza a invadir tierra que no está en el lado israelí o se levanta de una forma que hará difícil para nosotros crear un Estado palestino viable... es apropiado decirle a nuestros amigos israelíes que tenemos un problema”, aseveró el funcionario.
Indicó que el tema es parte de la agenda que Washington y Tel Aviv discuten ahora, como también la liberación de prisioneros palestinos y la actividad en los asentamientos, la cual insistió, debe ser detenida por el gobierno israelí.
Afirmó que aunque el llamado Mapa de Ruta, tendiente a lograr un acuerdo definitivo entre israelíes y palestinos ha registrado avances, ambas partes requerían continuar trabajando, y hacer notar los pasos dados por el gobierno de Sharon.
Frente a estas acciones, la reciente liberación de cientos de prisioneros palestinos, Powell demandó a la autoridad palestina medidas más fuertes contra agrupaciones radicales, ante el riesgo que éstas aprovechen el cese al fuego para reagruparse.
“Lo que realmente necesitamos es un esfuerzo más concertado de la autoridad palestina para ir detrás de estas organizaciones que tienen la capacidad de llevar a cabo actos terroristas, como Hamas y el Jihad Islamico”, apuntó el funcionario.
Powell consideró que tal acción se hace imperativa cuando “tenemos una situación donde, mientras hay un cese al fuego, estas organizaciones están mejorando su capacidad, probando nuevas armas y creando nuevas fábricas para construir más armas”.