Washington, (EFE).- La Administración Nacional estadounidense de Aeronáutica y del Espacio (NASA) reanudará a fines de este año las misiones de los transbordadores, tras corregir los problemas que causaron la tragedia del Columbia.
Funcionarios de la agencia espacial estadounidense señalaron el viernes que ya han iniciado los trabajos para poner en órbita al transbordador Atlantis, uno de los tres miembros de la flotilla también integrada por el Endeavour y el Discovery.
La misión 114 de los transbordadores tendrá como objetivo realizar el relevo de la Estación Espacial Internacional (ISS) y estará comandada por la astronauta estadounidense Eileen Collins, dijeron fuentes de la agencia espacial.
El transbordador Challenger, quinto integrante de la flotilla, se desintegró pocos segundos después del lanzamiento el 28 de enero de 1986 en una catástrofe que se cobró la vida de sus siete tripulantes y llevó a la suspensión de sus misiones durante más de dos años.
Las autoridades de la NASA dijeron que han ordenado a los ingenieros que hagan las modificaciones que sean necesarias para reanudar el programa de los transbordadores una vez que una comisión investigadora determine las causas del desastre del Columbia.
El transbordador, que realizó su primera misión en 1981, se desintegró el 1 de febrero tras ingresar en la atmósfera y cuando se disponía a terminar una misión científica de 16 días con un descenso en el Centro Espacial Kennedy.
El colapso de la nave dejó una estela de escombros de más de 30.000 fragmentos sobre una extensa franja de territorio entre los estados de Texas y Luisiana.
Testigos del desastre, que ocurrió en una mañana de cielos despejados, dijeron haber visto la caída de pedazos de la nave en los estados de California, Arizona, Nuevo México y Utah.
La tragedia, que se cobró la vida de los siete tripulantes del Columbia y provocó la suspensión de los vuelos de los transbordadores, se debió al impacto de un fragmento aislante del tanque externo sobre las losetas antitérmicas del ala izquierda.
También obligó a extender la permanencia de la Expedición 6 en la Estación Espacial Internacional, quienes deberán regresar el mes próximo a la Tierra en la cosmonave rusa Soyuz que está acoplada al complejo espacial.
La teoría más aceptada por los expertos sobre las causas de la tragedia del Columbia indica que el golpe causó una perforación a través de la cual entró una masa de aire candente, producida por la fricción con la atmósfera, la cual destruyó la nave.
En una conferencia de prensa, el director de vuelos de la NASA, William Readdy, confirmó el viernes que había notificado a los jefes de departamento de la NASA que debían establecerse como meta el lanzamiento del Atlantis para el otoño septentrional.
Readdy manifestó que en los próximos meses los expertos de la NASA analizarán formas de inspeccionar y reparar las losetas antitérmicas mientras el transbordador esté en órbita.
Las losetas tienen como objetivo proteger a la nave de la intensa fricción y el consiguiente aumento de la temperatura, causado por el choque de la nave contra las moléculas de la atmósfera a una velocidad de más de 25.000 kilómetros por hora.
Los vídeos sobre lanzamiento del Columbia revelaron que el fragmento aislante golpeó el ala izquierda de la nave 82 segundos después del despegue y los expertos de la NASA determinaron que el incidente no ponía en peligro al transbordador.
Algunos señalaron que, incluso si el daño era considerable, no se podía hacer nada para repararlo durante el tiempo en que la nave estuvo en órbita.
En su notificación a los expertos de la NASA, Readdy indicó que también se deberá realizar una reconsideración de la política actual de la agencia espacial sobre normas de seguridad y de los métodos que se utilizan para identificar problemas durante las misiones