Reuters
LOS ÁNGELES, EU.- La exitosa aventura submarina animada “Finding Nemo” (Buscando a Nemo) incursionó con enorme éxito en el mercado de los videos al vender una cifra récord de ocho millones de DVD’s y videos en su primer día en las tiendas minoristas de Estados Unidos, dijo ayer un ejecutivo de Walt Disney.
Disney en sociedad con Pixar Animation Studios Inc produjo la película animada por computadora acerca del pequeño pez perdido “Nemo” y la aventura de su padre para encontrarlo.
El récord anterior de ventas en un solo día era de cinco millones de DVD y videos, y lo ostentaba su colaboración previa: “Monsters, Inc”.
El filme fue estrenado en mayo y ha sido el de mayor éxito en la taquilla del 2003, con un poco menos de 340 millones de dólares en ventas de boletos de entrada en Estados Unidos y Canadá.
Bob Chapek, presidente de la división Buena Vista Home Entertainment de Disney, dijo que la compañía envió 25 millones de unidades a los minoristas, pero subestimó la demanda.
El ejecutivo indicó que Disney está trabajando con los fabricantes para hacer más copias para los minoristas que probablemente experimenten una escasez esta semana.
“Algunos de nuestros clientes nos han dicho que vendieron tres veces más de lo que predijeron en un día. Estamos haciendo en forma enérgica las copias que sean posibles, pero es probable que a algunos de nuestros clientes se les agoten sus existencias”, indicó.
Chapek dijo que la mezcla de ventas fue de casi 80 por ciento de DVD y 20 por ciento de vídeos, con los DVD ofrecidos a un precio sugerido al por menor de 19.99 dólares y los videos a 17.99 dólares.
Si los DVD y vídeos fueron vendidos a los precios sugeridos, la cifra de ventas de “Nemo” en su primer día totalizarían 156 millones de dólares, lo que sería un masivo debut en la taquilla de fin de semana para una película.
Chapek dijo que Disney está trabajando para actualizar las predicciones de ventas, pero declinó proveer nuevos pronósticos sobre los 25 millones de unidades ya embarcados.
Un colorido y animado océano
La tierna historia de un padre que debe cuidar a su hijo se desarrolla en un mar creado por computadora, pero con un realismo tan intenso que sus creadores explican los retos que sortearon para lograrlo.
-Buscando a Nemo (Finding Nemo) es una película llena de emoción que lleva literalmente al público hasta el fondo del océano en una travesía que le tocará el corazón, al hacerlo testigo de un derroche de amor filial como no se había visto antes en un filme de este género.
-El personaje central de esta historia es Marlin, padre de Nemo, dos pequeños y frágiles peces payaso color naranja con franjas blancas que viven dentro de una anémona que los protege de sus depredadores.
-Seguramente muchos padres se verán reflejados en el neurótico Marlin, quien tras un trágico suceso queda solo al cuidado de su pequeño y ahora no puede evitar sobreprotegerlo y a veces echar a perder el tiempo que pasan juntos. Pero nada puede defender a Nemo contra su destino y ahí se decide el resto de la película.
-Oren Jacob, supervisor técnico, señala que la parte más difícil fue precisamente trabajar con el agua, porque un océano creado en computadora debe ser creíble, así que hicieron una lista de los cinco elementos que sugieren un ambiente bajo el agua: iluminación, partículas, oleadas y corrientes, lobreguez, reflejos y refracciones para poder hacer sus escenarios virtuales.
-En preparación para este trabajo la gente de animación estudió a fondo el océano, buceó y visitó toda clase de acuarios; también analizó con atención la pecera de 25 galones que hay en Pixar, los modernos estudios de animación por computadora de San Francisco, California, además de leer todo tipo de información sobre la vida marina.
-También descubrieron que había tres texturas básicas en los peces: metálicos, gomosos y aterciopelados, así que los personajes que crearon se ubican en cualquiera de estas categorías.
-Dylan Brown, el supervisor de animación, viajó a Sydney para estar en contacto con la ciudad y el mar australiano, ya que la película se desarrolla en la barrera de coral.
-Con un gran número de personajes marinos por crear que variaban en tamaño y características, el grupo de animadores dirigidos por Brown aprendió sobre la locomoción de los peces y descubrió cómo crear conductas creíbles para estos seres sin brazos y piernas.
-En el pasado se les pedía a los animadores aterrizar sus personajes, con Nemo tuvieron que hacer lo contrario, hacer que se vieran flotando, pero en el agua, no en el aire.
-El resultado es una historia tierna, plena de color, con un padre que en la búsqueda de su hijo descubre muchas cosas sobre sí mismo y la paternidad.
FUENTE: Agencias
Buscando las voces
Decidir quién hará las voces es la otra parte importante en una película animada, que desde luego se hacen en inglés. Luego, con la distribución, cada región del mundo tiene sus propios doblajes en otros idiomas.
Andrew Stanton, el director de la cinta, señala que Albert Brooks fue la elección acertada para ponerle voz a Marlin, el padre nervioso y algo neurótico de Nemo.
Aunque la regla es primero desarrollar los personajes y luego buscar las voces que los interpretarán, Stanton esta vez se inspiró en Ellen DeGeneres para darle vida a Dory, la pez cirujano azul que acompaña a Marlin en su búsqueda y que tiene un problema de memoria corta.
La voz de Nemo estuvo a cargo de Alexander Gould, un niño actor de nueve años. Stanton reunió a un grupo de reconocidos actores para el resto de sus personajes; Willem Dafoe interpreta a Gill; Geoffrey Rush presta su voz a Nigel; Eric Bana es Anchor; la voz de Bruce es del actor australiano Barry Humphries y el mismo Stanton interpreta a Crush.