Agencias
LOS ÁNGELES, ESTADOS UNIDOS.- Pese a ser una de las mujeres más bellas del mundo, la actriz australiana Nicole Kidman no llegará a la ceremonia de los Oscar del brazo de un guapo galán. En su lugar, será acompañada por sus padres.
"Soy patética", bromeó la actriz en conferencia de prensa tras revelar que acudirá a la más glamorosa velada de Hollywood, el próximo 23 de marzo, en compañía de sus padres.
La bella australiana, de 35 años, que afirma no estar saliendo con nadie después de que hace dos años se divorciase de Tom Cruise, prefiere desfilar por las alfombras rojas de la meca del cine acompañada por su familia.
Además de sus padres, Anthony y Janelle, la elegante pelirroja ha aparecido en ceremonias de entrega de premios -entre ellas los Oscar del año pasado- del brazo de su hermana Antonia y de sus mejores amigas.
Y sobre las toneladas de papel que la prensa del corazón llena con especulaciones sobre su vida privada, Kidman se declara "un poco cansada".
"Pero me apasiona mi trabajo, me encanta hacer lo que hago, y los beneficios de eso me compensan por todo lo demás", agrega.
Kidman, nominada al Oscar por Mejor Actriz por segundo año consecutivo, fue seleccionada en esta ocasión por su encarnación de la atormentada escritora británica Virgina Woolf en el drama Las Horas.
La actriz hizo asimismo otra revelación poco corriente a la prensa, anunciando qué lucirá para la gran velada: un vestido de Gaultier.
"Soy bastante decidida", afirmó. "Si veo un vestido que me gusta, digo ‘eso es lo que voy a llevar’ y no paso mucho tiempo debatiéndome", explica.
"Sé lo que me gusta y llevo algo con lo que me sienta cómoda. Me gustan los vestidos con los que me puedo sentar y puedo comer", agrega.