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WASHINGTON, EU.- Los familiares del niño que acusa a Michael Jackson de abuso sexual son "personas simples" y "para nada motivadas por el dinero", afirmó el abogado de la familia, Bill Dickerman, a la cadena de televisión ABC.
"Son personas simples, de condición modesta y para nada motivadas por el dinero", dijo.
"La madre del jovencito, al principio, no quería iniciar ningún proceso judicial. Sólo quería que eso que le había pasado a su hijo no se repitiera en otros niños", dijo a su turno Jamie Masada, un amigo de la familia interrogado también por la televisora.
El acusador de Jackson, cuyo nombre no ha sido divulgado, es un niño de 12 años afectado de cáncer que habría conocido a la estrella en un hospital. Jackson lo habría invitado luego a su rancho ?Neverland? en California.
Nueve acusaciones pesan contra el cantante, que a mediados de los ochenta fue calificado como el "Rey del Pop".
Jackson recalcó en una entrevista que para él no es malo acostarse con niños, pero que nunca haría daño a uno de ellos.
Jackson fue arrestado el 20 de noviembre y semanas después fue acusado de siete cargos de "conducta lasciva" con un niño menor de 14 años y dos cargos de "haber administrado un tóxico".
Está en libertad bajo una fianza de 3 millones de dólares a la espera de una primera comparecencia judicial, prevista para enero.
La entrevista con el periodista Ed Bradley se llevó a cabo en la noche de Navidad.
Cuando el entrevistador preguntó a Jackson si cree que está bien acostarse con niños, teniendo en cuenta las acusaciones que se le han formulado, el artista respondió: "por supuesto". "¿Por qué no?", añadió.
"Si se trata de un pederasta, de un Jack el Destripador, de un asesino, claro que no es una buena idea. Pero yo no soy nada de eso: antes de dañar a un niño me cortaría las venas", dijo el cantante.
Jackson agregó que jamás volverá a vivir en su residencia de Neverland, en California, que "ya no es un hogar" después que un fuerte contingente policial allanó el lugar en busca de pruebas.
Autoridades rechazan malos tratos
Las autoridades policiales del condado estadounidense de Santa Bárbara negaron que el cantante Michael Jackson sufriera malos tratos durante su breve detención en noviembre debido a una acusación de abuso de menores.
En una entrevista televisiva que se emitió el domingo pasado, aseguró que había sufrido malos tratos por parte de los agentes policiales.
El cantante afirmó que tras entregarse a las autoridades, los agentes le dislocaron uno de sus hombros al tratarle con rudeza y se le hincharon las muñecas al apretarle las esposas en exceso. Añadió que fue detenido brevemente en una celda manchada con excrementos humanos.
Según el cantante, todo el proceso de detención se realizó "para denigrarme y tratar de quitarme mi orgullo".
Sin embargo, el departamento de policía del condado negó esas acusaciones y aseguró, en un comunicado, que Jackson fue tratado "con cortesía y profesionalismo".
Además, afirma que tanto el abogado de Jackson, Mark Geragos, como los responsables de la seguridad personal del cantante "agradecieron al departamento de policía por el nivel de cooperación y profesionalismo mostrados".
Jackson mostró en la entrevista una fotografía en la que se veía su brazo derecho amoratado e hinchado. Pero las imágenes de archivo delatan que, cuando dejó las dependencias policiales, Jackson levantaba su brazo derecho supuestamente dislocado para saludar a las cámaras haciendo el signo de la paz.