23 septiembre 2003
Singapur, 23 Sep (Notimex).- Corea del Norte rechazó hoy un llamado de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), para abandonar su programa nuclear, y acusó al organismo de Naciones Unidas de actuar a favor de la política "hostil" de Estados Unidos.
La AIEA aprobó el viernes pasado una resolución, propuesta por Canadá, que urgía a la República Popular Democrática de Corea (RPDC) a "desmantelar completamente" su desarrollo de armas nucleares, según reportes de prensa conocidos en esta ciudad-Estado.
"La RPDC no acepta una resolución injustificable y la declara nula, sin efecto y vacía", advirtió este martes la Agencia Central de Noticias de Corea (KCNA), medio oficial del estado comunista, en un comunicado.
De acuerdo con el comunicado, Corea del Norte no tiene obligaciones con la AIEA desde que abandonó en enero pasado el Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares (TPN), diseñado para detener la extensión de armas nucleares.
Recomendó que "sería mejor que los delegados de esos países que apoyaron la resolución, tomen un paseo y café que sentarse para discusiones improductivas".
Agregó que la AIEA parece estar manipulada por Estados Unidos, que ha encabezado la oposición a las ambiciones nucleares norcoreanas y cuya política hostil hacia la RPDC ha generado la actual crisis, señaló .
"La resolución es un resultado directo de la política hostil de Estados Unidos hacia Norcorea e ignora la naturaleza del problema nuclear en la península coreana", destacó el comunicado de la KCNA.
La crisis nuclear entre la RPDC y Estados Unidos se desató en octubre pasado, cuando Washington reveló que Pyongyang había admitido tener un programa secreto de desarrollo nuclear, con lo que violaba un acuerdo bilateral firmado en 1994.
Bajo ese acuerdo, Norcorea se comprometió a congelar el desarrollo de sus programas nucleares a cambio de suministro de petróleo y la construcción de dos reactores atómicos "seguros".
Estados Unidos suspendió ese suministro tras anunciar las ambiciones norcoreanas, mientras el régimen de Pyongyang reanudó sus programas nucleares, expulsó a los inspectores de la AIEA y abandonó el TPN.
Desde entonces, ambas naciones se acusan mutuamente de haber violado el acuerdo de 1994, y sus posturas sobre el asunto han imposibilitado el alcance de una solución y generado la preocupación en la región.
Un intento por alcanzar una solución pacífica fracasó el mes pasado, cuando representantes de ambas naciones se reunieron en Beijing con colegas de Corea del Sur, China, Japón y Rusia.