02 de diciembre de 2003.
Niega Gordillo impulsar reformas foxistas.
MEXICO, D.F., (SUN-AEE).- A su llegada al palacio legislativo de San Lázaro, Elba Esther Gordillo, aún coordinadora del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Cámara de Diputados, afirmó hoy que "no soy la Mujer Maravilla", Así respondió a las preguntas de si dejaría la coordinación por obligación: "Me duele, me duele aquí", mientras se apuntaba al corazón con la mano.
Entrevistada brevemente antes de ingresar a la sesión de hoy, Gordillo Morales dijo sentirse contenta por el respeto que le han mostrado algunos de sus compañeros pero a la vez triste porque se ha puesto en riesgo la unidad del Revolucionario Institucional.
Añadió que aún es la coordinadora y, por tanto, exige el respeto a la ley y a la soberanía del Congreso de la Unión, y en este sentido dejó entrever que hay muchas vías legales para hacer respetar esta situación.
Respecto a si ese asunto ya debe darse concluido, la lideresa priísta dijo que hay que esperar al estado de Derecho y esto significa que se le reconozca que aún es coordinadora parlamentaria e insistió en que no se aferra al poder.
Al respecto, aseveró que a lo que se aferra es a sus ideas, a la causa y al compromiso. "Han sido tiempos muy duros y difíciles, no tan sólo en estos tres meses sino desde antes".
Gordillo Morales insistió en que toda esta situación ha puesto en riesgo la unidad del partido, pero "mi prudencia, mi responsabilidad está a la vista de todos, pues estuve todo el tiempo buscando la negociación, el acuerdo y me quedan claras muchas cosas".
La también presidenta de la Junta de Coordinación Política dijo sentirse muy contenta en términos de saberse respetada por sí misma y esencialmente por tanto hombres y mujeres "que en esta bancada han conservado por fortuna, la integridad moral e intelectual".
Sin embargo, señaló que contradictoriamente también se siente muy triste por todo lo que está sucediendo y por ello le duele profundamente el corazón, por su condición humana ya que "no soy la mujer maravilla, simple y llanamente diría que ante la verdad, la mentira".