La entrega de despensas que repartan los candidatos y sus partidos durante las campañas de proselitismo en busca del voto de los duranguenses para la elección de diputados federales de julio próximo, que no porten la leyenda en que se deslinda al gobierno y las dependencias y organismo públicos de su entrega, podría ser considerada como delito.
En caso contrario, las despensas que entreguen las dependencias y organismos del gobierno deberán llevar etiquetada la leyenda sobre su origen, y deslindar a los candidatos y partidos políticos del beneficio que se reparte.
Para ello, según comentó el titular de la Secretaría de Contraloría del Estado, Juan Gerardo Parral Pérez, se tendrá la colaboración de los notarios públicos colegiados, que habrán de certificar que las despensas y otro tipo de materiales que se repartan durante las campañas de proselitismo, por parte de las dependencias públicas, porten la leyenda sobre el origen del beneficio.
Los notarios deberán dar fe de que los actos públicos en que se entreguen obras y otro tipo de beneficios no sean utilizados para apoyar a determinados candidatos o partidos, de tal manera que los recursos del erario lleguen a su destino sin ninguna tergiversación de su origen.
La leyenda que establece el origen de las despensas, materiales y otro tipo de acciones es con el fin de que se defina claramente que no son gracias a tal o cual candidato o partido, sino que son actos de gobierno generados por las demandas directas de los beneficiados.
Gerardo Parral señaló que en caso de que se presenten irregularidades existen las sanciones administrativas correspondientes, pero también puede tipificarse como delito electoral, en cuyo caso ya entrarían otras instancias para deslindar responsabilidades y de ser necesario iniciar los procedimientos legales para aplicar las infracciones respectivas.