El anuncio hecho por el Subsecretario de Comunicaciones y Transportes del Estado de Coahuila, en el sentido de que la dependencia a su cargo pondrá en marcha un plan para la modernización del transporte público de pasajeros, es positivo. El programa “Transforma”, incluye tanto el transporte municipal como el intermunicipal, lo que resulta de particular importancia en un área conurbada como la nuestra.
El programa que será presentado el próximo seis de marzo, pretende mejorar el servicio a partir de una estrategia de capacitación que incluye a todos los involucrados: Operadores, concesionarios y funcionarios de Gobierno. Otro de los enfoques apunta a la aplicación de sistemas de contratación de seguros y la compra de unidades y refacciones al mayoreo, en función de que los concesionarios se organicen entre sí.
Tiene razón el funcionario cuando insiste en que la modernización del transporte no es tarea exclusiva del Gobierno, lo que responsabiliza de manera especial a los concesionarios que como tales son quienes se benefician de la prestación del servicio, desde su perspectiva como negocio. Lo anterior sea dicho sin perjuicio de las obligaciones de control y vigilancia que corresponden a las autoridades.
El anuncio ocurre en el entorno del descubrimiento de una falsificación a gran escala que afecta a más de cien unidades, que en Torreón obtuvieron y mantienen su concesión al amparo de información y documentos falsos. Este botón de muestra y la negra historia del comportamiento de los concesionarios, es uno de los retos a vencer por este nuevo esfuerzo de modernización, que esperamos que ahora sí, arroje resultados positivos concretos.