TORREÓN, COAH.- Cruel se portó el destino con Jorge Luis Medellín de la Cruz, quien no pudo llegar a su primer día de trabajo en las instalaciones de la feria, pues un veloz auto lo arrolló destrozándole la cabeza, ayer frente a conocido centro comercial ubicado en el Periférico, donde permaneció tendido por espacio de varias horas. El responsable fue detenido.
El fatal accidente ocurrió poco antes de las 08:00 horas por la carretera 40 Matamoros-Mazatlán, Libramiento Torreón, kilómetro seis más 100 a la altura de Plaza Galerías, cuando Jorge Luis, de 36 años de edad, domiciliado en avenida Aldama No. 3729 oriente de la colonia Nuevo Torreón, se dirigía presuroso a cumplir con el compromiso de trabajo en las instalaciones de la feria, donde estaría junto a su padre y varios de sus amigos.
Para ello, desde temprana hora se despidió de su esposa a quien había prometido que de obtener el empleo, compraría los útiles escolares para sus hijos, sin siquiera sospechar que su fin estaba próximo.
A bordo de su bicicleta tipo balona, color rojo, enfiló hacia el Oriente, rumbo al sector industrial, habiendo tomado el Periférico para acortar tiempos, ilusionado en su nueva contratación luego de haber estado varias semanas sin trabajo.
Al llegar al entronque formado por el Libramiento y el bulevar Independencia, su euforia por no llegar tarde a su cita lo hizo olvidar la prudencia y se atravesó por el Periférico sin ver que un vehículo se aproximaba a gran velocidad.
El impacto fue brutal y la inerte humanidad de Jorge Luis voló por el aire por espacio de varios metros para caer pesadamente sobre el asfalto, con la cabeza totalmente destrozada, mientras su frágil transporte quedaba a corta distancia. Su muerte fue instantánea.
Obreros que se dirigían a sus respectivos empleos, fueron testigos presenciales de este mortal incidente que los hizo estremecer y por unos instantes no acertaron a reaccionar. Uno de ellos comentó de la muerte del joven entre quienes trabajaban en las instalaciones de la feria.
Sospechando lo peor, Gabriel Medellín Alvarado, de 55 años de edad, padre de Jorge Luis, preguntó por las características de la bicicleta y entonces ya no tuvo ninguna duda. Era su hijo el fallecido.
Alguien llamó a la Policía Federal de Caminos, que de inmediato se presentó y el suboficial Juan Antonio Martínez Padilla se hizo cargo de la situación, deteniendo a José Leonardo Ibarra Morales, de aproximadamente 43 años de edad, domiciliado en calle Mameyes No. 202 de la colonia Torreón Jardín, que manejaba el auto Nissan Sentra, 2001, gris, placas EXL-7325 de Coahuila. Quedó a disposición del Ministerio Público Rural.
Gabriel mientras tanto, no daba crédito a lo que veían sus ojos. El cuerpo de su hijo estaba destrozado y ya no podría cumplir con el compromiso hecho con su esposa que aún no estaba enterada del suceso.
Tardío reporte
Pese a que el accidente se registró poco antes de las ocho de la mañana, fue hasta las 09:15 horas cuando la Policía Ministerial recibió el reporte que a su vez comunicó al Ministerio Público de Delitos Contra la Vida y la Salud Personal, mesa dos, Coordinación “B”.
Hasta pasadas las 09:30 horas hizo su arribo el personal de dicha representación social que todavía realizó diversas diligencias antes de levantar el cuerpo y ordenar su traslado al anfiteatro para la necropsia de ley. Habían transcurrido más de dos horas desde el accidente.
En casa del occiso, aún no sabían de la fatal noticia.
Poco antes de las 11 de la mañana, el Ministerio Público informó a los familiares del occiso de lo que ocurrió, matando también las ilusiones que tenían porque las cosas mejoraran.
Gabriel Medellín Alvarado, padre de Jorge Luis y uno amigo de éste, Francisco Meléndez Talamantes, fueron quienes hicieron la identificación del cuerpo del infortunado.