Reuters
KIRKUK, Iraq.- Un atentado suicida con coche bomba mató ayer al menos a cuatro personas en un ataque contra oficinas de un importante partido turco, sólo horas después de que otras dos personas murieran por la explosión de un coche al oeste de Bagdad.
Los ataques cerca de las oficinas de la Unión Patriótica del Kurdistán (UPK) en Kirkuk, cuyo líder es actualmente el jefe del Consejo de Gobierno iraquí designado por Estados Unidos, y contra un consejo local respaldado por los norteamericanos parecían estar dirigidos contra la ocupación.
En Kirkuk, a 250 kilómetros al norte de Bagdad, una enorme explosión lanzó una nube de humo negro, dejó dos coches destrozados y destrozó las ventanas de una escuela primaria cercana, lo que dejó heridos a varios niños. En total más de 30 personas resultaron heridas, según un hospital.
“Estoy 100 por ciento seguro de que fue un atentado suicida”, dijo el agente de la policía Shwan Majid Karim.
El líder de la UPK, Jalal Talabani, es miembro del Consejo de Gobierno de Iraq nombrado por Estados Unidos. Estaba visitando Turquía ayer cuando se produjeron las explosiones en Estambul.
Horas antes, la explosión de un coche bomba había sacudido las oficinas de un consejo local nombrado por Estados Unidos en la localidad iraquí de Ramadi, al oeste de Bagdad.
Responsables locales dijeron que habían muerto dos personas y otras siete habían resultado heridas en lo que según testigos también fue un atentado suicida.
“Un coche lleno de explosivos se acercó rápidamente. El conductor se hizo explotar dentro del coche”, dijo un residente de la zona.
El ataque fue uno de una serie contra objetivos vinculados a la ocupación liderada por EU en la conflictiva ciudad de Ramadi el miércoles por la noche.
Un agente estadounidense en el lugar del ataque en Kirkuk confirmó la muerte de cuatro personas además del suicida.
La cadena de ataques —hubo también informaciones sin confirmar sobre explosiones en la ciudad de Mosul, al norte del país— sirvió para recordar lo inseguro y peligroso que sigue siendo Iraq más de siete meses después de que las tropas estadounidenses derrocaran a Saddam Hussein.
Las fuerzas de Estados Unidos están planeando entregar las responsabilidades de seguridad de Ramadi a la policía iraquí a principios del próximo año en una experiencia piloto de traspaso de poder a las fuerzas de seguridad iraquíes.
En Kerbala, una ciudad chiita al sur de Bagdad, explotó una bomba en un colegio de enseñanza primaria el miércoles por la tarde, matando al menos a dos niños e hiriendo a varios más, dijeron testigos y un médico local.