VILNA, (Reuters).- Los habitantes de un balneario lituano recibieron un regalo de Navidad anticipado, cuando 50 toneladas de bananos llegaron arrastradas a las costas del Báltico.
"La corriente provenía del suroeste, donde los vientos con velocidad de tormenta probablemente arrancaron un contenedor de bananos verdes de un barco", dijo Jonas Vigelis, jefe de la unidad de rescate y patrulla marina del área.
Las personas acudieron en multitudes para recoger la fruta tropical, que fue arrojada hacia las costas del congelado litoral de la ciudad balneario de Sventoji.
"Este tipo de cosas ocurre de vez en cuando. Una vez fueron naranjas, otra fue madera buena", dijo Vigelis.