Reuters
KABUL, AFGANISTÁN.- Al menos 61 personas murieron y decenas resultaron heridas en brotes de violencia en Afganistán, en las 24 horas más cruentas en más de un año en el convulsionado país, dijeron ayer las autoridades.
Al menos 25 personas, la mayoría combatientes rebeldes, murieron en un enfrentamiento entre fuerzas de un derrocado líder provincial y las del que lo sustituyó en una remota región de la provincia de Uruzgán, dijo un ministro del gabinete.
Al mismo tiempo, al menos 15 personas murieron, incluyendo una mujer y seis niños, al explotar en un autobús una bomba que según las autoridades fue colocada por el Movimiento Talibán.
Y también ayer las tropas del gobierno de Kabul dijeron haber matado a 16 combatientes talibanes y de la red Al Qaeda.
El ministro, que pidió no ser identificado, dijo que el enfrentamiento en la provincia de Uruzgán fue entre fuerzas del señor de la guerra Amanullah, ex líder de la provincia, y su sucesor, Abdul Rahman Khan.
El funcionario dijo que Khan aseguró que el combate comenzó cuando fuerzas de Amanullah dispararon contra un autobús en el que viajaban sus partidarios.
“Khan me dijo que ocho de sus partidarios murieron en el incidente del autobús y que 20 resultaron heridos, y que después murieron siete de sus combatientes. Amanullah me dijo que diez de sus hombres perdieron la vida, incluyendo familiares”, agregó.
Los combates siguen en la zona y el gobierno central está intentando que las paren una tregua, dijo el ministro.
El vicegobernador de Helmand, Haji Pir Mohammed, dijo que el autobús explotó en el distrito de Nadh Alí, a unos 30 kilómetros al sureste de la capital provincial, Lashkargah.
Ghulam Mahaiuddin, jefe administrativo de la sureña provincia de Helmand, dijo que la explosión en el autobús ocurrió en la mañana de ayer, en el distrito de Nadi Ali, al occidente de la capital provincial, Lashkargah.
“Ocho de los muertos en el autobús eran hombres, seis de ellos eran niños y también murió una mujer”, agregó.
Mahaiuddin dijo que al parecer la bomba estalló por accidente y que presuntamente iba a ser usada para un ataque en Lashkargah la próxima semana, durante celebraciones por la independencia.
Culpó de la explosión a guerrilleros del Movimiento Talibán, que fue derrocado a fines del 2001 por rebeldes que aprovecharon intensos bombardeos estadounidenses, y dijo que era probable que la persona que llevaba la bomba hubiera muerto.
Estados Unidos atacó al Talibán acusándolo de cobijar a la red Al Qaeda, del militante islámico Osama bin Laden y responsabilizada de los atentados con aviones de pasajeros secuestrados del 11 de septiembre del 2001 en Nueva York y Washington, que dejaron unos 3,000 muertos.