México, DF.- A finales del año pasado, cuando Ana Claudia Talancón visitó Los Ángeles durante una de las promociones del polémico filme El Crimen del Padre Amaro, la actriz se adelantó a predecir que probablemente la cinta representaría a México en la próxima entrega de los Oscar.
Tres meses después de esa declaración, el timbre del teléfono la despertó en su casa casi de madrugada. Del otro lado de la línea se escuchó la voz de su representante, quien con entusiasmo y felicitaciones le dio la buena noticia: El Crimen del Padre Amaro estaba nominada en la categoría de Mejor Filme Extranjero por la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood.
“Estoy muy contenta, emocionada, nerviosa, pero sobre todo orgullosa de formar parte del cine (mexicano)”, comenta ahora la joven actriz de 22 años de edad. Sin embargo, Talancón no quiere pensar en qué pasará si la película en realidad se lleva la prestigiosa estatua dorada. “No me gusta esperar nada, estar pensando en qué va a pasar. Solitas se dan las cosas y hasta ahora se han dado maravillosas”. Para ella, además de maravillosas, las cosas han avanzado a pasos agigantados. En tan sólo siete años de carrera, la chica originaria de Cancún, Quintana Roo, ha logrado forjarse un nombre de prestigio dentro del mundo del espectáculo mexicano. Ha participado en exitosas telenovelas que la llevaron por toda Latinoamérica. Su incursión en el cine llevó su rostro alrededor del mundo, y su talento es ahora bien conocido en varios países.
Su sólida actuación en la polémica cinta, donde Ana Claudia da vida a Amelia -una chica que se enamora del sacerdote de su pueblo y que finalmente resulta embarazada- le han ganado ofertas de trabajo en Europa, Estados Unidos y Perú. Pero ella, para empezar, aceptó una en México.
Acaba de terminar el rodaje de la cinta en español que llevará como título Lady’s Night, donde interpreta a una mujer que se atreve a cambiar su vida rompiendo todos los esquemas de la sociedad para sobresalir de la multitud y no ser una más de la manada.
De todas formas, Talancón sabe que pocos de sus proyectos darán tanto de qué hablar como lo hizo El Crimen del Padre Amaro. “Cuando la estábamos filmando, no teníamos idea de que iba a causar tanta polémica. Sabíamos que era un tema controversial, pero superó todas nuestras expectativas”, expresa la actriz cuya última participación en la pantalla chica fue al lado de Itatí Cantoral en la telenovela Vale Todo.
En su país -que se mantiene fiel al catolicismo- varios grupos intentaron censurar la película debido a una presunta “falta de respeto” a la religión. Rápidamente, los amantes del séptimo arte se armaron de valor y exigieron su proyección. “Nadie esperaba realmente la reacción tan fuerte del público, el apoyo de toda la gente hacia la libertad de expresión y de escoger lo que uno quiere y no quiere ver”. Y esto, según Ana Claudia, se debe a que la calidad, no sólo del cine mexicano, sino de la industria latinoamericana, está mejorando. “Hay mejores películas, mejores temas. Estoy orgullosa de formar parte de esa ola de actores que estamos abriendo las expectativas del cine mexicano y del cine latinoamericano a nivel mundial”, expresó. “(Pero) no sirve de mucho ganar todos los premios con una película, si ésta no nos da prestigio para hacer más filmes”.
Aún así, la chica de ojos claros espera que la industria siga creciendo para que en un futuro no muy lejano regrese la “época de oro” del cine mexicano. A eso añade -en inglés-: In God we Trust.
El sentimiento general del equipo del Padre Amaro es un sentido de dicha muy grande, porque se está apreciando el trabajo que hicimos. En México, la gente atribuía el éxito de la película al polémico tema que se trata, pero hemos ido a muchos festivales y hemos tenido mucho reconocimiento internacional. Eso excede al tema controversial.
Que la gente se dé cuenta que es una película bien hecha, bien escrita, bien dirigida, bien actuada que se puede ver, escuchar y sentir”.