SANTO DOMINGO, REP. DOMINICANA.- Las mexicanas Paola Espinosa y Laura Sánchez obtuvieron ayer la medalla de plata en la prueba de clavados sincronizados de trampolín de tres metros, al recibir 275.70 puntos.
El oro fue de las canadienses Blythe Hartley y Emilie Heymans, con 298.62, y el bronce para las estadounidenses Cassandra Cardinell y Sara Hildebrand, con 250.50. Cuba fue cuarto y Brasil quinto.
Fue uno más de los casi seis mil clavados que han realizado a lo largo del año; es el último de una ronda de cinco; ahí se define el oro en saltos sincronizados del trampolín de tres metros.
Se tiran Paola Espinosa y Laura Sánchez. Las mexicanas realizan exactas, precisas, la piruetas en el aire. Son gotas de agua que caen del cielo en celestes trajes de baño, directo a la fosa del estadio Olímpico "Juan Pablo Duarte".
Se detiene el suspiro de los mexicanos en las tribunas. Nadie se mueve. Ambas entran casi exactas al agua. ¡No! Laura se pasa ligeramente y por instinto quiere corregir, pero ya es tarde.
Pierden puntos. Se quedan con la plata.
Paola y Laura Sánchez inician bien, en cerrado duelo, pero desde el tercer salto comienzan a despegarse las canadienses.
Pese al esfuerzo no lograron recuperarse las mexicanas, sobre todo porque sus saltos no tenían un mayor grado de dificultad, que se combinó con una lesión de Laura Sánchez en la rodilla izquierda y que propició el yerro en el último clavado.
Rommel Pacheco, campeón en plataforma de diez metros el sábado, dio el único oro a México en este deporte y con ello evitó que arrasara Canadá, que ganó todas las restantes pruebas.
El balance es de siete oros para Canadá y uno para México.
El rey en los clavados de Santo Domingo fue el canadiense Alexandre Despatie, campeón mundial, que ha sumado tres oros y la plata en la prueba que ganó Pacheco. La superioridad canadiense en las finales femeninas resultó avasalladora, con cuatro oros.
Pacheco, el nuevo valor del clavado mexicano, con 17 años, demostró que puede ser el sucesor de Fernando Platas, dominador continental los últimos años con siete medallas panamericanas y que en Santo Domingo no obtuvo oro.
Insatisfecha se nota Paola. Han sido muchas competencias a lo largo del año, y aún tienen por delante el Panamericano Juvenil que se realizará en Brasil a partir del uno de septiembre.
"Es que ya estoy cansada, han sido muchas competencias", argumenta. Y menciona, entre otros, las tres fases del Canamex, El Canamex, selectivos, Mundial Juvenil, estos Panamericanos y la próxima justa brasileña.
Del último clavado reconoce que, en efecto, "nos faltó un poco y ahí se decidió el oro".
Laura Sánchez, por su parte, explica que desde febrero pasado debía someterse a una operación de condromalasia, nivel tres, que es urgente eliminar. Es una lesión dolorosa porque la rótula rosa con otro hueso y provoca descalcificación, y una especie de fibrosis.
La intervención está programada para el 14 de septiembre en el Hospital Español de la ciudad de México. Y también reconoce que, sí, tuvo problemas en el último salto. "Me fui muy adelante, iba muy lenta y me pasé un poco con la pierna izquierda al entrar al agua", confesó.