EFE
Washington, EU.- Un juez federal del estado de Nebraska freno ayer la aplicación de la Ley firmada por el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, que prohíbe un método específico de aborto, debido a que la norma podría violar la Constitución.
El juez Richard Kopf emitió una orden de bloqueo temporal a la Ley, tras una audiencia celebrada en respuesta a una demanda legal de defensores del aborto.
Sin embargo, la orden del juez se aplica sólo a los cuatro médicos que presentaron la demanda, por lo que la orden judicial no tendrá carácter nacional.
Pero esos cuatro facultativos están licenciados para trabajar en un total de seis estados del país, por lo que la decisión del juez podría extenderse a ellos.
Kopf argumentó que su decisión se basaba en que la Ley firmada ayer por Bush no incluye excepciones para abortar con el método prohibido.
La firma de la Ley, que había sido vetada por Bill Clinton, fue considerada como un gran triunfo por las organizaciones opuestas al aborto, mientras que los defensores de la interrupción del embarazo -legalizada en 1973 por el Tribunal Supremo- prometen una larga batalla legal que puede acabar en la máxima instancia judicial.
En un discurso en Washington antes de promulgar la Ley, aprobada por ambas cámaras del Congreso el mes pasado, Bush hizo alusión a las demandas judiciales presentadas contra esta Ley en tres estados e indicó que “este Gobierno defenderá enérgicamente esta Ley ante cualquiera que trate de prohibirla mediante los tribunales”.
En su intervención, el Presidente estadounidense indicó que la Ley contra el método llamado “de nacimiento parcial” es un “decisión muy estudiada y que se basa en investigaciones muy serias”.
La operación consiste básicamente en provocar el parto y dar muerte al feto mediante la inserción de un objeto punzante en la base del cerebro, en una práctica que suele realizarse en el segundo o tercer trimestre después de la concepción.
El método “está ampliamente considerado por la profesión médica como algo innecesario”, agregó Bush, quien consideró que la decisión de ilegalizar esta interrupción del embarazo “refleja la compasión y la humanidad de los ciudadanos estadounidenses”.