19 de diciembre de 2003.
Washington, (Notimex).- Estados Unidos toleró el uso de armas químicas por parte del régimen del entonces presidente de Iraq, Saddam Hussein, cuando así convino a sus intereses políticos en el Golfo Pérsico, revelaron hoy nuevos informes.
Según un cable diplomático obtenido por la organización National Security Archive, bajo la Ley de Libertad de Información, las críticas de Washington entonces habrían sido sólo una mera maniobra para preservar la imagen publica de su política.
El documento puso de relieve la paradoja del ahora prisionero Hussein, quien décadas atrás era visto como un hombre responsable y de "pensamiento simple" por parte del gobierno de Londres, causante junto con Washington de su derrocamniento.
Una vez más Estados Unidos buscó favorecer la relación con Hussein en beneficio de su política exterior en la región, en momentos de particular tensión derivado del ascenso al poder en Irán de los fundamentalistas islámicos.
En particular, un cable diplomático de 1984, reveló los esfuerzos de Estados Unidos por ganarse las simpatías del gobierno de Hussein cuando su país libraba una guerra con Teherán, entonces percibido como el principal enemigo de Washington en la región.
Ese año, el entonces enviado especial para el Medio Oriente del gobierno de Ronald Reagan, Donald Rumsfeld, viajo a Bagdad con instruccionSeo d, Gchararierno iraquí un mensaje sobre armas de destrucción masiva.
El mensaje fue que las críticas públicas de Estados Unidos a Iraq por el uso de armas químicas, no descarrilarían los esfuerzos de Washington por construir mejores relaciones con Bagdad.
En el cable de Schultz a Rusmfeld, éste le ordenó al segundo informar a Bagdad que "nuestra condena -por el uso de armas químicas- derivó estrictamente de nuestra fuerte oposición al uso de armas químicas letales, donde quiera que ocurran".
Shultz instruyó a Rumsfeld a que una vez en Bagdad, debería enfatizar al gobierno de Hussein que "nuestro interes en prevenir una victoria irani y continuar mejorando las relaciones bilaterales, al ritmo que Iraq escoga, permanece sin cambios".
Aunque en fechas recientes, confrontado con informes previos al respecto, Rumsfeld ha dicho que durante su viaje a Bagdad, el "advirtió" a Hussein sobre el uso de armas químicas, informes desclasificados del Departamento de Estado no lo muestran así.
Los documentos desclasificados por National Security mostraron también como décadas atrás, Hussein era visto como un elemento para mejorar las relaciones entre Iraq y los países occidentales.
Destaca aqui un comunicado de 1969 del entonces embajador de Reino Unido en Iraq, H.G. Balfour, poco después de que Hussein se convirtió en asesor del entonces presidente iraquí.
En su cable a Londres, tras su primer reunión con Hussein, Balfour apuntó que "debo juzgarlo, siendo un hombre joven, como un formidable miembro en la jerarquía del Partido Baath, de pensamiento simple y con quien es posible hacer negocios".
Agrego que "un joven hombre presentable, con una sonrisa cautivadora. Inicialmente considerado un extremista miembro del partido, pero a quien la responsabilidad quizás ablande".