POR RAFAEL IBARRA
EL SIGLO DE TORREÓN
FRANCISCO I. MADERO, COAH.- El rastro municipal sigue trabajando en condiciones insalubres que ponen en peligro la salud de los consumidores de carne de este municipio, el inmueble carece de las mínimas medidas de higiene para el manejo de la carne y ninguna autoridad ha tomado cartas en el asunto para remediarlo.
Este rastro funciona desde 1982 y desde esa fecha nunca ha contado con una red de drenaje para desalojar los desechos que se generan en el interior del inmueble, simplemente tiene un canal que guía el agua mezclada con la sangre y la grasa de las vacas hasta un pequeño vado que se encuentra a espaldas de la construcción.
Por este motivo, a escasos metros del inmueble hay una laguna de agua mezclada con grasa que es un foco de infección para las familias que viven en las cercanías de este lugar.
En el interior del inmueble, los cargadores tiran los restos de las vacas en el suelo junto a los montones de estiércol que los matanceros sacan de las vísceras del ganado, aunque estas personas lavan la carne, evidentemente este manejo no es el adecuado.
Otro extremo del inmueble es utilizado como tiradero para depositar el estiércol y las vísceras que no se comercializan, esto provoca que el terreno esté rodeado de perros que se alimentan de los desechos.
Todo sigue igual
El día de ayer El Siglo de Torreón visitó las instalaciones del rastro municipal y se pudo constatar que el rastro sigue trabajando en las mismas condiciones insalubres.
Humberto Puentes Ortega, administrador del rastro, dijo: “Todo sigue igual, no ha cambiado nada, seguimos trabajando en la misma miseria”.
El funcionario no quiso continuar con sus declaraciones y simplemente se limitó a reconocer que las condiciones del rastro son insalubres y dijo que el único que podía dar declaraciones era el líder de los introductores de ganado.
Con la intención de dialogar con Jesús Rodríguez Salinas, secretario general de los introductores de ganado, se visitó el establo “Las Nenas”, ubicado a un costado de la carretera Torreón-San Pedro a la altura de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, en este lugar un empleado del ganadero dijo que su patrón no estaba en el rancho.
Deben clausurar
A finales del año pasado, Jesús Rodríguez Salinas, líder del sindicato de introductores de ganado, dijo que la Jurisdicción Sanitaria debería clausurar de inmediato el rastro para presionar a las autoridades y lograr que por fin se construya un inmueble que cuente con toda la infraestructura necesaria para sacrificar a las vacas y manejar adecuadamente la carne que se obtiene de ellas.
“Nos dejaron trabajar porque según ellos se estaba gestionando la construcción de un nuevo rastro, pero no fue verdad, deberían clausurar de inmediato, nosotros como quiera llevamos el ganado al rastro de Gómez Palacio o Torreón, pero es urgente que actúen”, dijo.
El secretario general del sindicado de introductores de ganado dijo en aquella ocasión: “estoy de acuerdo en que lo clausuren, esto es lo que la gente come y es insalubre”.
“Simplemente no sirve, el Ayuntamiento debe construir un rastro que sea salubre, porque este problema representa un riesgo para la salud de la población”, dijo el líder del sindicato.
LAS FALLAS
Durante un recorrido realizado por El Siglo de Torreón se detectaron muchas irregularidades en el funcionamiento del rastro municipal, a continuación se enlistan las principales anomalías:
· No cuenta con una red de drenaje
· No bañan a los animales antes de sacrificarlos
· No tienen la infraestructura necesaria destazar a los animales, por ende tiene que hacer este trabajo en el suelo y eso provoca que la carne se mezcle con el estiércol
· A espaldas del inmueble hay una laguna de agua mezclada con sangre y grasa de las vacas
· También hay un tiradero de estiércol
· Estas dos últimas irregularidades generan malos olores y representan un foco de infección
FUENTE: Investigación El Siglo de Torreón