EFE
MIAMI, EU.- Con peticiones casi unánimes de un mayor respeto a los derechos humanos y un cumplimiento superior de las recomendaciones sobre los mismos, América celebró ayer el 55 Aniversario de la Declaración Universal de estos derechos.
En Estados Unidos, más de 50 grupos lanzaron la “Red de Derechos Humanos de EU”, una coalición para combatir el “alarmante y creciente” número de violaciones de estas normas.
En la mira de estos activistas figura de forma prominente la “Ley Patriota”, que aprobó el Congreso tras los atentados de 2001 y expandió considerablemente los poderes de los aparatos de seguridad.
En México, la Oficina del Alto Comisionado de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para los Derechos Humanos entregó al Gobierno, a petición del presidente Vicente Fox, un informe de 190 páginas en que se plantean varias recomendaciones, como reformar la Constitución y reforzar los organismos de control.
Como caso emblemático, la ONU destacó lo sucedido en Ciudad Juárez, donde entre enero de 1993 y julio de 2003 fueron asesinadas 321 mujeres de bajos recursos.
En Colombia, más de 140 organizaciones no gubernamentales destacaron ayer que ni el Gobierno, ni los grupos armados ilegales han cumplido las recomendaciones del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos.
Las ONG exigieron al Gobierno “cumplir inmediatamente, sin excepción, las recomendaciones” de los tratados internacionales que ha suscrito; y a las guerrillas y los paramilitares, liberar sin condiciones a los miles de secuestrados y evitar las acciones que afecten a la población civil.
Las principales organizaciones humanitarias de Venezuela dijeron que la situación de los derechos ha empeorado en el último año debido al aumento de la pobreza, la violencia del conflicto político y la debilidad del Estado.
El privado Programa Venezolano de Educación Acción en Derechos Humanos (Provea) presentó su informe anual en el que dice que “el aumento de la pobreza “expresa una vulneración estructural del derecho a la no discriminación”, que convierte a los sectores populares -un 80 por ciento de la población- en los más vulnerables.
En Perú, el presidente Alejandro Toledo instauró ayer la fecha del diez de diciembre como Día de la Reconciliación Nacional, en una ceremonia en que ratificó la ejecución de un plan de paz y desarrollo en favor de las zonas azotadas por la violencia política.
En Ecuador, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) solicitó al Gobierno que esclarezca la desaparición de tres personas que fueron testigos de una operación policial en la que murieron ocho y sobre la que existe una denuncia por “abuso de autoridad”.
En Cuba, esposas y familiares de 14 disidentes presos iniciaron hoy en La Habana un ayuno de doce horas en demanda de la libertad de los presos políticos de la isla.
Por otra parte, un grupo de personalidades, entre ellos la ex secretaria norteamericana de Estado Madeleine Albright, el novelista hispano-peruano Mario Vargas Llosa y el ex presidente checo Vaclav Havel, abogaron en Londres por la libertad de los presos políticos en Cuba, en una carta publicada ayer en el diario “Financial Times”.
En República Dominicana, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos denunció hoy que en lo que va de año han muerto casi 200 personas en ejecuciones extrajudiciales en esta nación caribeña.
En Honduras, en “La caminata de las candelas”, que se celebró simultáneamente en ciudades de Canadá, México, Guatemala, Nicaragua y Costa Rica, en las que la organización humanitaria Casa Alianza atiende a niños de la calle, se pidió que cesen los asesinatos, y el maltrato físico y psicológico hacia los menores.