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MÉXICO, DF.- Luego de pedir la renuncia a los titulares de áreas estratégicas de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de la anterior administración, el nuevo presidente del máximo tribunal del país, Mariano Azuela Güitrón, les solicitó a sus compañeros ministros revisaran cada uno de los casos para decidir quién se queda y quién se va.
A raíz de esta decisión, los 11 ministros que integran el Pleno ya ratificaron a por lo menos cuatro de los funcionarios jurídicos más importantes que formaron parte del equipo de trabajo que impulsó en su gestión el expresidente de la Corte, Genaro Góngora Pimentel.
Sin embargo, la ratificación de los funcionarios judiciales es a condición de que se les reduzca el sueldo para que no ganen más que un magistrado de un tribunal de distrito.
Con esta reducción de salario -la cual todavía no se lleva a la práctica de manera oficial-, los funcionarios ratificados ganarían menos de 81 mil 674 pesos mensuales, que es la cantidad que ganaban los magistrados federales al menos hasta el año pasado.
De darse este cambio, prácticamente los funcionarios ratificados ganarían la mitad de lo que percibe el presidente de la Suprema Corte.
De acuerdo con los datos publicados por el Poder Judicial en el Diario Oficial de la Federación en el 2002, el salario mensual del presidente de la Corte es de 149 mil 327 pesos.
Los funcionarios ratificados son los encargados de la Secretaría y Subsecretaría General de Acuerdos, la Unidad de Controversias Constitucionales y Acciones de Inconstitucionalidad, la Comisión Substanciadora y la Coordinación General de Compilación y Sistematización de Tesis.
Esta es la primera ocasión en que el presidente de la Corte decide compartir con el resto de los ministros sus atribuciones para ratificar o remover a las personas que ocupan los cargos bajo su mando.
Esta medida resulta congruente con lo que dijo Azuela Güitrón al asumir la presidencia, cuando señaló que “de alguna manera gráfica se puede establecer con todo rigor que el presidente (de la Corte) es igual a cada uno de sus integrantes, pero inferior y sometido a ellos cuando actúan y deciden de manera colegiada”.
En su momento, tanto los ministros Vicente Aguinaco Alemán como Genaro Góngora Pimentel tomaron por sí solos las decisiones sobre las áreas administrativas y jurídicas que estaban bajo su mando, de acuerdo con la estructura orgánica de la Corte.
Se espera que en los próximos días el Pleno de la Corte también decida la situación laboral de los titulares de la Secretaría de Finanzas y Servicios Administrativos y la Secretaría de la Contraloría y Gestión Administrativa, las cuales a su vez tienen a su cargo, entre ambas, unas 17 direcciones generales o coordinaciones de unidades principalmente administrativas.