SALTILLO, Coah.- La renuncia de Rosario Robles Berlanga a la presidencia del PRD, es un mensaje de que hay una crisis interna en el perredismo nacional, como lo demuestra el desplome de su votación en 20 estados. En Coahuila, perdió su lugar como tercera fuerza política y se ubicó en el cuarto sitio, según estableció el secretario de Electoral del Comité Directivo Estatal, Roberto Fernández Rodríguez.
Explicó que esta baja en las preferencias electorales, se debe a la mala imagen que han proyectado “liderazgos desgastados por intereses personales, que lo único que se disputa es llegar a obtener una diputación o cargo plurinominal”.
Dijo que ahora es el momento de recomponer el partido, y que en el caso de Coahuila es necesario que renuncie su dirigente José Guadalupe Céspedes Casas, junto con todo el CDE, para que se designe desde la capital del país una delegación que se haga cargo del proceso de renovación del PRD.
Dedujo que quien filtró la información a la prensa sobre las condiciones financieras y de endeudamiento del partido en el país, fue Carlos Navarrete, secretario de Organización del CEN, quien pertenece a la corriente de la llamada Nueva Izquierda, encabezada por Jesús Ortega, cabeza del grupo de “Los Chuchos”.
Indicó que hay una paralización total en el CDE en Coahuila, donde los comités municipales y el Consejo son solamente virtuales, de membrete, y que no hay respeto hacia el estatuto por parte de la directiva estatal.
“Vamos a hacer propuestas en el órgano estatal que es convocar al Consejo Estatal, para hacer un análisis de la elección del 6 de julio y de la renuncia de Rosario Robles, y en tercer lugar queremos proponer que la dirigencia en Coahuila emita un comunicado donde se manifieste el apoyo a Leonel Godoy, y que se pida la renuncia del resto de la dirigencia nacional”.
Explicó que en CEN están las personas que bloquearon el trabajo de Robles Berlanga y que trataron de mantenerla como rehén de sus intereses personales, por lo que se pide su renuncia o también bloquearán el trabajo del líder provisional.
En el plano estatal, dijo que es tal la crisis interna del partido, que no tienen ni siquiera perfilado un posible candidato a gobernador del estado, con miras a las próximas elecciones locales en 2005.
Dijo que tampoco es conveniente que el PRD participe en las elecciones con una candidatura común, con el PRI o con el PAN, y que lo mejor sería un candidato propio, preferentemente de la sociedad civil para evitar divisiones internas.