HOUSTON, E.U.- Las entradas para el encuentro amistoso entre las selecciones de futbol de México y Estados Unidos, a efectuarse hoy en el estadio Reliant de Houston, se agotaron ayer.
El juego, al que acudirán unos 70 mil aficionados, marcará un récord de asistencia para un partido de futbol (soccer), y un evento deportivo internacional en Texas.
"Estamos emocionados de que los boletos para un encuentro de futbol se hayan agotado", dijo Steve Patterson, vicepresidente del equipo Texans de la NFL, que organiza el choque entre los dos representativos.
"El que se hayan agotado las entradas muestra que en Houston no sólo existe afición para el futbol (americano) sino también para el soccer", aseguró.
El partido, programado a las 19:00 horas local, ha despertado un inusitado entusiasmo entre la amplia comunidad mexicana en Houston, a grado tal que se estima que los gritos y las porras durante el encuentro favorecerán mayoritariamente al equipo tricolor.
"Probablemente se vea un contingente por México en las tribunas, pero estamos acostumbrados a eso", dijo Brian McBride, uno de los principales anotadores de Texas, durante el entrenamiento de su equipo, ayer en el estado de la Universidad Rice.
Luego de la victoria de Estados Unidos sobre su similar de México en los octavos de final de la Copa del Mundo Corea-Japón 2002, hoy ambas selecciones se volverán a enfrentar.
El equipo mexicano arribó la víspera a esta ciudad, y ayer en la mañana pisó la cancha del estadio Realiant.
Los organizadores acordaron permitir a los aficionados llevar banderas, pero sin asta para evitar accidentes, sin embargo, por razones de seguridad, la lista de artículos que no podrán ingresar al Reliant es larga.
Entre ellos se incluyen hieleras, paraguas, cojines, bolsas, maletines, estuches de cámaras fotográficas y de binoculares, botellas, botes, tambores, alcohol, termos, sillas y armas entre otros.