04 octubre 2003
Jerusalén, (EFE).- Israel prepara una dura respuesta al atentado suicida cometido hoy en Haifa que incluye la posibilidad de deportar al presidente palestino, Yasser Arafat, en las próximas horas, dijeron fuentes gubernamentales.
El primer ministro israelí, Ariel Sharón, se reunió con los ministros y oficiales del Ejército poco después del atentado en un restaurante de Haifa, en el que 19 personas han muerto y más 50 han resultado heridas, para discutir la deportación de Arafat.
Tras el atentado, el ministro de Sanidad, Dani Naveh, afirmó que Israel debería "aprovechar esta oportunidad para librarse de Arafat"
"El ataque -dijo Naveh-, es otra evidencia que echa por tierra a los que defienden la permanencia de Arafat en la región y que su expulsión podría causar mayor daño".
El que fuera líder del Partido Laborista, Amram Mitzna, se mostró en desacuerdo con la medida y argumentó que el destierro de Arafat "no haría más que aumentar el odio y la violencia".
David Baker, funcionario de la oficina de primer ministro, Ariel Sharón, se mostró mas comedido al precisar que "la ANP debe tomar medidas inmediatas contra los grupos palestinos armados".
"La bomba de Haifa es otra indicación de que la ANP continúa rechazando adoptar la mínimo medida contra la infraestructura terrorista".