Sin duda que hubo quienes vendieron después de la hora permitida, afirma Javier Gutiérrez Pesquera
TORREÓN, COAH.- Sin duda alguna, la Ley Seca establecida con motivo del proceso electoral de mañana, fue violada por muchos comerciantes de cerveza, principalmente clandestinos, ante la falta de capacidad de vigilancia de control reglamentario del área de Alcoholes, aseveró Francisco Javier Gutiérrez Pesquera, titular de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM).
Luego de asegurar que ya hay conciencia entre muchos de estos vendedores, al funcionario, a pregunta expresa por El Siglo de Torreón, no le quedó más que reconocer que también existe certeza que la disposición de las autoridades fue omitida flagrantemente por muchos de esos mercaderes que sin pensarlo dos veces hicieron “su agosto” ante la gran demanda de los consumidores.
Lo anterior, explicó luego, es el resultado de un reglamento de alcoholes obsoleto que por muchos años ha permitido que tanto los comerciantes establecidos lícitamente como los clandestinos, hagan de las suyas ante la falta de severidad en las sanciones que se les aplican por violar el horario de cierre.
“Que se les retire la licencia y se les clausure en forma definitiva es el justo castigo para quienes de manera sistemática y descarada infringen los lineamientos de las autoridades, ya que sólo de esta forma se podrá combatir a los infractores lícitos e irregulares”, aseveró Gutiérrez Pesquera.
“Estoy de acuerdo –agregó— que debe existir cierta flexibilidad y sobre todo criterio para llegar a proceder en una forma tan tajante y severa, sobre todo para quienes por descuido se les haya sorprendido vendiendo bebidas alcohólicas fuera de horario, haciéndolos objeto de sanciones de tipo económico si son una, dos y hasta tres ocasiones, pero a los reincidentes sistemáticos no”.
Existen comerciantes, sobre todo clandestinos, que al saber que a las 21:00 horas se deja de vender cerveza y licor en todos los expendios y en los bares a la una o dos de la mañana, no pierden oportunidad de hacer negocio, vendiendo el producto mucho más caro de lo normal, ya que existe una fuerte demanda de parte del público consumidor, dijo.
Si a lo anterior se añade que todos los domingos impera la Ley Seca, entonces desde días antes se ocupan de surtir del número suficiente de cartones, ya sea de media o familiar, para hacer frente a los múltiples clientes que tienen bien ubicados los domicilios donde les venden a toda hora del día y la noche, señaló.
Alcoholes, en la calle
Cuestionado sobre el éxito de la Ley Seca que se estableció a partir de las 00:00 horas de este sábado con motivo del proceso eleccionario dominical que se celebrará en todo el país, dudó del mismo, no por falta de vigilancia sino más bien por la falta de capacidad para ello, ya que son escasos los inspectores de Alcoholes.
Sobre si la DSPM debe intervenir en esto, aclaró que lo hace, siempre y cuando se sorprende en flagrancia a los infractores a los que se les levanta una notificación para lo cual se solicita la presencia del personal de Control Reglamentario.
Que quede claro que la Policía Preventiva acude en apoyo de los inspectores, cuando éstos lo piden, en caso que el comerciante asuma una actitud violenta en su contra, mas no podemos intervenir ni no se nos solicita, explicó.
Gutiérrez Pesquera reiteró que la labor operativa de la DSPM apoya a los diferentes departamentos municipales que lo pidan, pero “si no tenemos llamado ¿cómo vamos a actuar?”, concluyó.
Desproporción
*Si en todas las ciudades existe una desproporción entre el número de policías y el de habitantes, esta problemática es más marcada entre los inspectores de Alcoholes y los lugares donde lícita o ilícitamente se vende cerveza.
*En la actualidad se cuenta con diez elementos de Control Reglamentario para atender la “vigilancia” de los establecimientos donde se expenden bebidas embriagantes.
*Se estima que existen entre 300 y 350 locales donde se comercializa con cerveza y licor, además de otro tanto de clandestinos.
*Si se viola el horario de cierre o bien se sorprende a un vendedor ilegal, los infractores son objeto del decomiso de la mercancía y una multa, lo que permite la reincidencia.
FUENTE: Dirección de Seguridad Pública Municipal