México, (Notimex).- Por qué personas aparentemente racionales e inteligentes cometen actos de crueldad y violencia, cuáles son las raíces del comportamiento destructivo y si podemos aprender a vivir en paz con nosotros mismos y con los demás, son algunas preguntas que plantea el nuevo libro de Daniel Goleman.
"Emociones destructivas. Cómo comprenderlas y dominarlas" es el título de la más reciente obra del reconocido escritor estadounidense de best sellers, que en esta ocasión parte de un diálogo científico con el Dalai Lama, para abordar el tema de la infelicidad personal y los conflictos interpersonales a través de la filosofía budista.
En el libro, publicado por Vergara, sello de Grupo Zeta, el autor del libro "Inteligencia emocional", demuestra que tanto la infelicidad personal como los conflictos interpersonales son consecuencia de los tres venenos que aniquilan a las personas: la ansiedad, la ira y las falsas ilusiones.
Un grupo de científicos encabezados por Goleman, analizan y reflexionan sobre temáticas diversas que atañen a los seres humanos de los tiempos modernos, con el interés de proporcionar conclusiones y antídotos contra emociones humanas negativas.
A través de cinco capítulos que suponen cinco días de conversación con el Dalai Lama, Goleman define las emociones destructivas, las emociones que hay en la vida cotidiana, las ventanas que tiene el cerebro, la mejor forma de dominar las habilidades emocionales y cuáles son las razones del optimismo.
"Los científicos pueden observar hoy los centros cerebrales que calman las tormentas interiores y demostrar que técnicas como la meditación fortalecen la estabilidad emocional y potencian los estados de ánimo positivos", señala Goleman en el libro.
El libro llega a conclusiones a partir de responderse preguntas tales como "¿Qué papel desempeñan las emociones destructivas en la evolución humana?, están integradas en nuestros cuerpos?, son universales o es la cultura la que determina cómo nos sentimos?, cómo podemos cultivar la compasión.
En "Emociones destructivas" muestra que la tradición budista lleva mucho tiempo insistiendo en que el reconocimiento y la transformación de las emociones destructivas se asientan en las prácticas espirituales.
Para la ciencia, la naturaleza de los estados emocionales resulta paradójico, pues aunque se trata de respuestas del cerebro que han configurado la mente y la vida, amenazan el futuro individual y colectivo de los hombres.
"El diálogo con el Dalai Lama, un verdadero ejemplo de serenidad en tiempos tan atribulados como los que nos ha tocado vivir, tuvo un fuerte impacto en todos nosotros, señala.
Agrega que su influencia, que comenzó en forma de un análisis exclusivamente intelectual, acabó convirtiéndose en una búsqueda personal de los posibles antídotos para las emociones destructivas, una búsqueda que ya ha comenzado a dar resultados tangibles.
A lo largo de 490 páginas "Emociones destructivas. Cómo comprenderlas y dominarlas", aborda el tema de las emociones que destruyen, tanto desde el punto de vista de la filosofía budista pero también desde la visión de la ciencia.
"Ambas tradiciones han conjuntado sus esfuerzos y como fruto de esa colaboración están acometiéndose estudios experimentales que apelan a los más sofisticados instrumentos de que dispone la ciencia actual a fin de corroborar la eficacia de los antiguos métodos para el cultivo de los estudios emocionales positivos", dice Goleman.