México, (Notimex).- El director general de Protección Civil del Estado de Guerrero, Gustavo Piña Lagunes, comentó la posibilidad de que se registre otro gran sismo en México como el de 1985 e, incluso, un maremoto en las costas del Pacífico.
Al participar en el I Congreso Internacional para la Prevención de Desastres que se realiza en esta ciudad, Piña Lagunes citó la teoría llamada "brecha sísmica" en la que destacan ciertas áreas a lo largo del llamado "cinturón Cincunpacífico".
Señaló que en esa zona del mundo, donde se generan anualmente un promedio de dos sismos superiores a los ocho grados en la escala de Richter, también se encuentran los volcanes activos que más daño han causado en la historia del planeta.
A ello se le agrega que allí están las enormes placas tectónicas que originan los sismos de gran magnitud, así como sismos superficiales a escasa distancia de las costas generadores de maremotos.
Indicó que en el caso del Estado de Guerrero, esa brecha que viene desde Colima y que va a dar hasta Chiapas, tiene un hueco sísmico desde Petatlán en la costa grande de Acapulco hasta Ixtapa-Zihuatanejo, que mide un promedio de 300 kilómetros a lo largo de la línea costera.
Comentó que de acuerdo con expertos nacionales e internacionales "dicha zona presenta de 70 a 100 por ciento de probabilidades de ser fuente generadora de un gran sismo en las costas del Pacífico".
Así, dijo, es como ya se preveía antes del 19 de septiembre de 1985 que Guerrero sería fuente de un gran sismo, aunque en ese caso fue un estado aledaño: Michoacán. En cuanto a los maremotos, explicó que en su mayoría éstos se derivan de actividad volcánica submarina o de sismos con epicentro en el lecho submarino.
Abundó en hay experiencias de maremotos que en el caso de Ixtapa-Zihuatanejo penetraron 300 metros tierra adentro, pero hace años cuando esa zona no era lo que es ahora. Sin embargo, "el riesgo está latente", insistió.