06 noviembre 2003
Naciones Unidas, (EFE).- En una de las votaciones más apretadas de su historia, los miembros de la ONU pospusieron por dos años cualquier decisión sobre una futura convención internacional que prohíba la clonación humana con fines reproductivos.
Un total de 80 países votaron a favor de una moción presentada por los países miembros de la Organización de la Conferencia Islámica (OCI) para aplazar el debate, 79 votaron en contra y 15 se abstuvieron.
La moción, debatida y votada en el marco de la comisión de la Asamblea General de la ONU encargada de Asuntos Legales, fue presentada ante la imposibilidad de alcanzar el consenso en un tema que todos consideran muy complejo y con graves implicaciones.
Al presentar la moción de aplazamiento, la delegación iraní explicó que la petición no significaba que se pronuncien por ninguno de los dos proyectos de resolución presentados sobre el tema.
El primero, presentado por Costa Rica y apoyado por más de sesenta países, entre ellos Estados Unidos, contempla dar mandato a un comité especial para que elabore una convención contra todo tipo de clonación.
El segundo, patrocinado por Bélgica, prohíbe la clonación con fines reproductivos, pero deja a cada Estado la libertad de decidir si permite su investigación terapéutica, aunque con la obligación de regularla.
La Conferencia Islámica considera que el aplazamiento permitirá disponer de más tiempo para estudiar "todos los aspectos y ramificaciones del tema" y avanzar hacia el consenso.
La delegación belga, que intervino en nombre de los más de 20 patrocinadores de su propuesta, consideró "preferible" aplazar cualquier decisión.
Precisó que si bien no era "una solución satisfactoria", es "realista y deja abierta la posibilidad de llegar a un acuerdo en el futuro" sobre un tema que, en su opinión, requiere el consenso. Además, señaló que quizá en ese plazo las investigaciones científicas "ofrecerán más elementos y arrojarán más luz" sobre este tema.
La delegación india afirmó que si el comité votaba por dos propuestas opuestas "sería contraproducente" y que el mandato que debe recibir el comité encargado de elaborar la convención debe tener "el mayor apoyo posible" y contar con la cooperación de todos los países.
Entre los que se pronunciaron contra la moción de aplazar el debate estuvo España, cuya representante, Ana Menéndez, consideró contrario al reglamento de la ONU la moción de Irán.
Además, subrayó que la clonación humana es un tema "importante y urgente" y que "no conviene enviar a la comunidad internacional el mensaje de que no hemos sido capaces de reflexionar y tomar una decisión", motivos por los que pidió a los demás países que se opusieron al aplazamiento.
La delegación de Uganda, que dijo encontrarse en una posición muy difícil como miembro de la OCI y patrocinador de la propuesta costarricense, recordó que cuando Francia y Alemania introdujeron el tema de la clonación humana en la agenda de la Asamblea hace dos años subrayaron que era "muy importante" y que había que abordarlo "antes de que se nos escapara de las manos".
"No creo que ahora sea menos importante", comentó para agregar que aplazar el debate sería "una autoderrota" y no beneficiará "la credibilidad del comité" ni de las Naciones Unidas en general.