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San Cristóbal de Las Casas, Chis.- El obispo Felipe Arizmendi Esquivel expresó su preocupación por lo que llamó “parálisis en el diálogo entre EZLN y Gobierno Federal, porque pareciera que ya nada se puede hacer, por la desconfianza y la descalificación sistemática”. A pesar de la suspensión del diálogo desde hace siete años, dijo, el EZLN (Ejército Zapatista de Liberación Nacional) no sigue el método de otras guerrillas, como las de Colombia, que dicen estar dispuestas al diálogo “pero continúan con sus actos bárbaros de terrorismo, secuestros y enfrentamientos”.
En su reflexión dominical que adelantó a los medios de prensa, Arizmendi sostuvo que el campo en México enfrenta una “parálisis muy preocupante y que a consecuencia de la apertura comercial llegan productos a un precio con el que no pueden competir los campesinos”. “Los gobiernos de países más desarrollados canalizan muchos subsidios al campo, exigen la liberación de aranceles a sus productos y ponen demasiadas trabas para recibir lo que producen nuestros campesinos”, indicó el prelado.
“No ha habido suficiente protección al campo, por lo que ha quedado desprotegido, abandonado, paralizado”, añadió el obispo, quien opinó que a los campesinos no les conviene trabajar sus tierras, porque pierden ante el mercado globalizado.
Felipe Arizmendi pidió proteger al campo y encontrar medidas adecuadas para que no se siga paralizando más, así como abrir los mercados internacionales a los productos de los mexicanos.
“En este sentido -agregó-, son muy loables las mesas de diálogo que se llevan al cabo, siempre y cuando haya apertura de mente y de corazón en todos los participantes para que no se hagan propuestas utópicas, sino que se encuentren soluciones posibles y urgentes”.