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BARCELONA, ESPAÑA.- Los directivos de la Fórmula Uno deben olvidarse de sus intereses personales y favorecer el automovilismo durante la conferencia de esta semana sobre medidas de recorte de costos, dijo ayer el presidente de la escudería BAR, David Richards.
"Debemos volver atrás unos pasos y devolver el puro espíritu de competición al automovilismo. Creo que si lo hacemos, daremos respuesta a muchos de nuestros críticos", declaró en la presentación del coche de British American Racing para 2003.
"Debemos estar abiertos al cambio, también. Si algunas de las nuevas ideas benefician al deporte en conjunto, deberíamos adoptarlas", dijo.
La reunión de los jefes de equipos con el presidente de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) Max Mosley tendrá lugar el miércoles en Londres, para discutir posibles cambios técnicos.
La FIA ya ha incluido novedades para alcanzar un mayor atractivo en las pruebas en una competición dominada de cabo a rabo por Ferrari, como las calificaciones a vuelta sencilla o una nueva estructura de puntuación.
Pero, también quieren reducir los costos en un clima económico endurecido para asegurar que no se repitan los casos de los equipos Prost y Arrows, que han tenido que abandonar la competición.
La reunión podría cuestionar algunos de los sistemas electrónicos conocidos como "ayudas de conducción" que fueron vueltos a usar en 2001 tras haber sido prohibidos para asegurar que la tecnología no dominase todo.
"Lo que tenemos que hacer es realmente dedicarnos a cómo mejorar el espectáculo para los espectadores", dijo Richards.