Torreón, Coah.- Vecinos de varios ejidos del municipio de Matamoros realizaron un plantón en las instalaciones de Simas Rural, donde cerraron el acceso por una hora en demanda de tarifas bajas, aunque no lograron su objetivo.
Encabezados por el dirigente matamorense Mario Gómez, unos 50 ejidatarios de comunidades como El Refugio, San Antonio y San Isidro, entre otros, acudieron a las oficinas de Simas-Rural, localizadas en avenida Allende y calle García Carrillo, con la finalidad de protestar por los cobros que dicen son exagerados.
José Arellano, de El Refugio, dice que cada mes paga en promedio 100 pesos, pero en la casa viven únicamente él y su mujer, lo que considera un cobro muy alto.
Los quejosos cerraron la puerta principal e impidieron a otros usuarios que llegaban a pagar sus recibos, lo que generó molestias entre algunos de éstos y a punto estuvo de suscitarse un conflicto, pero más tarde llegaron agentes de la Policía Estatal para controlar la situación y obligar a los manifestantes a dejar libre el acceso.
En ausencia del gerente de la dependencia estatal, el contador de ese organismo, Rodolfo Díaz Aguilar, atendió a los matamorenses y les explicó que no se podía hacer excepciones, ya que se cobra sobre el consumo.
El servidor público dijo que llevar el agua hasta esos ejidos resulta muy costoso por el rebombeo que hacen, pues el agua recorre decenas de kilómetros y se consume una cantidad considerable de energía eléctrica.
Tras precisar que la tarifa mínima es de 57 pesos y no se puede cobrar menos, Díaz Aguilar dijo a El Siglo que los usuarios quieren que no haya medidor y una tarifa más baja, pero eso resultaría incosteable al Sistema. “Además, se cobra por lo que consumen, de tal forma que quien consume más obviamente paga más”.