14/abriil/2003
Miami, (Notimex).- Los ex prisioneros estadounidenses rescatados la víspera en Irak revelaron que temieron ser ejecutados, pero admitieron en sus primeras declaraciones a la prensa que durante su cautiverio recibieron "buen trato de los iraquíes".
Shoshana Jhonson, la única mujer reportada como prisionero de guerra por el Comando Central norteamericano, dijo luego de que fue liberada que "eran como una papa caliente".
"La cosa estaba llegando a un punto en el que yo creí que nos iban a matar", confesó la cocinera del Ejército de 30 años al cotidiano Miami Herald.
Según Jhonson el temor de ser asesinados crecía porque sus guardias estaban temerosos de los cada vez más cercanos ataques de Estados Unidos.
Jhonson junto con Edgar Hernández (21 años), Joseph Hudson (23), Patrick Miller (23), James Rilley (31), pertenecen a la 507 División de Abastecimiento y fueron capturados en una emboscada el 23 de marzo pasado, en el primer domingo de la guerra en Irak.
Los otros dos militares estadunidenmse rescatados, David Williams JR. (30 años) y Ronald Young (26), fueron capturados un día después luego de que su helicóptero un Apache aterrizó de emergencia en el territorio iraquí.
De acuerdo al parte militar, de la división 507 cinco soldados resultaron muertos y seis fueron capturados, entre ellos la soldado Jessica Lynch, que fue rescatada la semana pasada, en un tiroteo en Nasiriya en el que sus armas se encontraban atascadas en la arena.
Miller dijo después de que fueron capturados que los vecinos del lugar le colocaron un cuchillo en su garganta y que le pegaron a él y a otro prisionero con un palo, pero indicó que al descubrir que Jhonson era mujer "la trataron muy bien, no sé porque".
La emboscada duró unos 15 minutos y "fue toda una ciudad y recibíamos disparos por delante, por detrás, por la izquierda", narró el sargento Riley.
Miller dijo por su lado que al ver que "eran demasiados" y que sus armas estaban trabadas por la arena, ordenó la rendición. Y luego los residentes de la zona saquearon los camiones.
Un día después Williams el piloto del Apache, quien volaba con el oficial Young, dijo que un disparo le rompió el cuero de su bota izquierda, quemándole el pie y obligándolo a aterrizar para después ser capturado.
Ambos grupos de prisioneros militares estadunidenses fueron reunidos unos dos días después de su captura, en una estación de policía iraquí en Bagdad, donde permanecieron 15 días y recibieron ropa y atención médica.
Los dos relataron que su condición mejoró a medida que los policías les cambiaban a través de seis locaciones diferentes en los últimos seis días de cautiverio y que recibían dos o tres comidas al día con dietas de arroz, pollo, pan, agua y té árabe.
Señalaron que fueron interrogados varias veces. Williams dijo que le preguntaron sobre posiciones de artillería estadunidenses, mientras que Jhonson sobre sí las provisiones de comida llegaban de Kuwait.
Johnson resultó herido por arma de fuego en ambos tobillos, Hudson tenía lesiones de bala en los glúteos y un costado, y Hernández fue herido en el brazo derecho.
El coronel Larry Brown, jefe de operaciones de la Fuerza Expedicionaria de la Marina de Estados Unidos, informó que los prisioneros fueron rescatados después del aviso de algunos guardias cerca del poblado de Samara, al norte de Bagdad.