RIYAD, (Reuters).- La policía moral del sur de Arabia Saudita planea llevar a cabo redadas para asegurar que las tiendas no venden flores, candelabros y regalos a aquellos que planean celebrar el Año Nuevo, según informó un periódico local.
El diario en idioma árabe Al-Watan dijo que la Autoridad para la Promoción de la Virtud y Prevención del Vicio (APVPV) de la provincia de Aseer está decidida a mantener la prohibición que el conservador reino musulmán impone sobre las celebraciones no musulmanas.
"Las patrullas serán enviadas a las tiendas de flores y regalos en los próximos dos días antes de fin de año, para asegurar que no se vendan adornos para las celebraciones de año nuevo", dijo un dirigente local de la APVPV, de acuerdo con el periódico.
La autoridad, un pilar del reino ultra conservador desde su nacimiento, ha prohibido también los adornos de Navidad en las tiendas. Tampoco permite a los comercios tener regalos del día de San Valentín.
"Para los musulmanes, sólo hay dos días de vacaciones al año: Eid al-Fitr y Eid al-Adha", dijo el dirigente, refiriéndose a las celebraciones musulmanas que siguen al mes sagrado del Ramadán y a la peregrinación a la Meca.
Localizada cerca de la frontera con Yemen, Aseer es una ruta tradicional para extremistas y traficantes de armas que entran en el país.
Responsables sólo ante el rey Fahd y separados de la policía ordinaria, los miembros de la Autoridad patrullan las calles con escolta policial, asegurándose de que su estricta interpretación de las costumbres islámicas se cumpla.
El papel de la APVPV ha sido sometido a un escrutinio sin precedentes en Arabia Saudita, que lucha contra extremistas y ataques de extremistas relacionados con Osama Bin Laden.