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Bruselas, Bélgica.- Alemania, Bélgica, Francia y Luxemburgo propusieron ayer la creación de una fuerza de defensa de reacción rápida para el 2004, al margen de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
La propuesta fue impulsada por el presidente francés Jacques Chirac, el canciller federal de Alemania, Gerhard Schröeder y los primeros ministros de Bélgica, Guy Verhofstadt, y Luxemburgo, Jean-Claude Juncker, durante una mini-cumbre de defensa en esta capital.
La nueva fuerza defensiva es uno de los siete puntos incluidos en la iniciativa Unión Europea de Seguridad de Defensa (UESD), propuesta por los cuatro líderes para incluirse en la próxima Constitución del bloque.
Chirac, Schröeder, Verhofstadt y Juncker aclararon durante la presentación pública de la propuesta que no intentan ir en contra de la Alianza Atlántica, si no más bien reforzar su capacidad y la defensa de los países miembros del bloque.
“El proyecto no se dirige contra la OTAN, si no a un refuerzo de la Alianza Atlántica y el pilar europeo”, explicó el canciller federal de Alemania, cuyas relaciones con Estados Unidos se han deteriorado recientemente por su oposición a la guerra en Iraq.
Chirac aseguró que un refuerzo de la defensa europea sería benéfico para la OTAN, tras destacar que existe un vínculo fundamental entre la Alianza Atlántica y Estados Unidos, “No es que haya demasiada América si no poca Europa”, aclaró Schröeder.
Se trata, agregó de inmediato el primer ministro luxemburgués, de un núcleo de capacidad colectiva, de planificación y realización de operaciones de la Unión Europea, la cual estará abierta a todos los socios de la UE que deseen.
“Este estado mayor estratégico podría utilizarse cuando la UE decida no recurrir a la utilización de medios y capacidades de la UE bajo la batuta de Naciones Unidas”, reiteró Chirac, tras afirmar que la construcción de la defensa europea contribuye a reforzar a la OTAN.
Dicha capacidad de planificación defensiva se instalaría en Bruselas a mediados del 2004, según explicó el jefe de gobierno belga, quien insistió en que la iniciativa no va en contra de los lineamientos de la OTAN.
La reunión entre los cuatro líderes, todos opuestos a la decisión de Estados Unidos de bombardear Iraq por incumplir la resolución de Naciones Unidas (ONU), ha generado cierta preocupación en el resto de los 15, principalmente en los aliados de Washington.
Por su parte, en una entrevista, la canciller española, Ana Palacio, afirmó que una verdadera política de seguridad y defensa de Europa no se puede con lograr con la actuación de sólo tres o cuatro países.