Gómez Palacio, Dgo.- Habitantes de la avenida Mina y la calle Degollado de esta ciudad manifestaron su inconformidad por el funcionamiento del restaurante bar ?Tropical?, el que se ubica a escasos metros de dos planteles educativos y una iglesia bautista de ese sector.
Lourdes Mesta, a nombre de unas 40 familias afectadas acudió a la Presidencia Municipal con el titular del Departamento de Alcoholes del municipio, Enrique Saavedra Urbina, pero éste le hizo saber que el conflicto está fuera del ámbito de competencia del gobierno local, debido a que el propietario del establecimiento cuenta, desde principios de este año, con un amparo de carácter federal que le permite seguir operando.
La quejosa manifestó que la inconformidad radica en que el negocio es un antro disfrazado de restaurante bar, pues en los últimos días se ha visto a mujeres que aparentemente se dedican a la prostitución atrayendo a la clientela en las puertas del negocio.
El problema es que sobre esa misma acera, en la otra esquina se localiza la Primera Iglesia Bautista, mientras que en la manzana del frente funcionan el jardín de niños ?Miguel Hidalgo? y una escuela primaria, a pesar de que el reglamento establece una distancia mínima de 150 metros entre las instituciones y negocios dedicados a la venta de bebidas embriagantes.
Desde que en el pasado mes de enero se publicitó la reapertura del bar, los vecinos hicieron saber su inconformidad a la autoridad municipal, aunque en este caso únicamente se cambió de una esquina a otra.
El cambio de giro es lo que mantiene inconformes a los vecinos, pues según alegan no se está ajustando a la forma en que debe funcionar un restaurante bar, sino que en forma discrecional se permite el ejercicio de la prostitución en el interior.