PARIS, (Reuters) - Un francés que redujo a cenizas los ahorros de toda su vida antes de tomarse dos botes de pastillas seguirá viviendo pero sin dinero en el banco, después que sus vecinos impidieron que se suicidara.
El hombre, como en sus cuarenta, recibía atención en un hospital psiquiátrico desde finales de octubre.
Los vecinos en el pueblo de Burdeos en el sur de Francia vieron humo saliendo de su casa y llamaron a los servicios de emergencias, informó el martes el diario Liberation.
El hombre, quien vivía solo, sacó del banco sus ahorros de 240.000 euros (288.500 dólares) y prendió fuego a la pila de billetes de 500 euros en su cuarto de baño antes de deglutir las pastillas, con la esperanza de no dejar nada después de su muerte.
Sin embargo, ahora no le queda más remedio que empezar una nueva vida, dijo su abogada Dominique Remy al periódico. "No es peligroso. Lo único es que ha destruido todo su capital", dijo.