24 noviembre 2003
MEXICO, D.F., (SUN-AEE).- Para que no haya diputados que tengan una clientela electoral muy superior en número a la de otros legisladores, el Instituto Federal Electoral (IFE) realizará una redistritación de México, que le costará alrededor de 70 millones de pesos.
Ha detectado que en 100 de los 300 distritos electorales, por el crecimiento de la población en algunos casos y la emigración en otros, ya no corresponde al total de habitantes que según las normas debe tener cada uno.
Entonces tiene planeado realizar un nuevo trazo cartográfico para que cada distrito represente en promedio 320 mil habitantes, considerando las cifras del censo de 2000.
Rodrigo Morales Manzanares, presidente de la Comisión del Registro Federal de Electores del IFE, en la que participan representantes de los partidos, precisó que con ese dinero se hará tanto una redistritación como un reseccionamiento.
La redistritación no quiere decir que aumentará o disminuirá el número de distritos. Seguirán siendo 300. Lo que se hará será un nuevo trazo cartográfico, explicó.
En la actualidad, continuó, alrededor de un tercio de esos 300 distritos no tienen la cifra que se estimó en la anterior redistritación, de 1996, de poco más 200 mil habitantes, e incluso han rebasado el margen del 15 % que se había previsto, tanto hacia arriba como hacia abajo.
De acuerdo con lo que establece el artículo 53 de la Constitución, el total de la población se debe dividir entre los 300 distritos, para que cada uno tenga una cifra similar.
Este criterio ya no se cumple porque ahora, al crecer la población nacional y acentuarse la emigración de gente que se va de sus entidades a buscar trabajo en Estados Unidos, resulta que hay diputados que tienen una clientela electoral, por ejemplo, de 500 ó 600 mil habitantes y otros legisladores de 300 ó 200 mil habitantes en sus respectivos distritos, dijo el consejero Morales Manzanares.
Para la anterior redistritación, la de 1996, por acuerdo de las autoridades y partidos, se determinó que era aceptable que la cifra estimada de 220 mil habitantes aumentara o se redujera en un 15 %. Esto ya fue rebasado en 100 de los 300 distritos.
Debido a ello se ha vuelto una necesidad y urgencia proceder a una nueva redistritación. Lo primero que hará el IFE será definir una metodología y luego crear un comité técnico que sin influencias partidistas haga la demarcación territorial, informó el consejero.
Advirtió que con el nuevo trazo pudiera ocurrir que se dividiera un bastión partidista, pero que esto no es ningún factor que se deba tomar en cuenta para hacer la distribución de los distritos.
Por lo que se refiere al "reseccionamiento", Rodrigo Morales empezó por recordar que hay más de 60 mil secciones en el país y que los electores pueden observar en sus respectivas credenciales el número de sección que les corresponde.
Se tiene establecido por norma que haya mil 500 electores por cada sección, para facilitar y agilizar el proceso de votación.
Según el consejero, 10 mil secciones están ya fuera de rango y esto se tendrá que ajustar también el próximo año.
Por lo pronto, una vez que hoy se apruebe la integración de las nuevas comisiones del instituto, la del Registro Federal de Electores se abocará a elaborar la metodología para la nueva distritación.
El consejero Rodrigo Morales tiene la experiencia de haber participado en la redistritación del Distrito Federal, cuando era miembro del instituto local electoral.