México, DF.- Para ser bella sólo se necesita tener una actitud positiva ante la vida, lo demás viene por añadidura. Esto lo sabe muy bien Rebeca de Alba, quien a sus 38 años luce radiante.
Ella es una mujer que conquista con una sonrisa, porque es bella por fuera y por dentro. Rebeca cuida tanto su cuerpo como su espíritu, por eso hay en ella un equilibrio que se nota.
“Para estar en paz y tranquila debes ser congruente contigo misma; no hago cosas en las que no creo, no me rodeo de gente que me quita la energía, no me gusta lo superficial”, dice.
El sueño de muchas mujeres es ser como las famosas, para lo cual ahora dio a conocer sus secretos de belleza, los cual son tan sencillos como ella. “Hago las cosas básicas y sencillas que cualquier mujer hace”.
“El ejercicio es la clave para comer mejor, para dormir bien, para oxigenar la piel. Como de todo. El problema no es subir de peso, sino subir de grasa. Incluyo legumbres, frutas, pasta, pan integral, leche. Con eso tengo hierro, calcio, carbohidratos, lípidios en toda mi alimentación. Eso fortalece los huesos, las uñas, el cabello y la piel”.
La ganadora de Nuestra Belleza en los 80 una vez a la semana hace un spa en casa. “Es bueno chiquearte. Yo me pongo mascarillas hidratantes y reafirmantes. “Cuando viajo llevó todo conmigo para no dejar de hacerlo. Si no estoy trabajando, me aplico un tratamiento para el cabello.
“Juego un poco con las cremas que uso porque mi piel después de tres o cuatro semanas necesita reaccionar de manera diferente, para que tenga luminosidad”. Rebeca, quien es la imagen de Memorable, la nueva fragancia de Avon, carga a cuestas la etiqueta de ser bonita y eso implica estar bien arreglada siempre. “No me han visto cuando voy al supermercado, no voy de tacones ni de traje sastre, pero desarreglada no.
Mi bisabuela nos enseñó que el arreglo no es otra cosa que tu autoestima, el cuidarte, el verte bien ante un espejo, para ti, no para los demás. Soy una mujer bastante natural en mi arreglo, nunca sobrecargo un maquillaje. Soy tradicional, conservadora, yo misma me sorprendo cuando me pongo minifalda y taconazos, pero creo también que es una parte muy femenina. Paseo a mis perros en tenis y jeans”.
Rebeca se acepta tal cual es, por eso se olvida de sus defectos y sólo se ocupa de sus virtudes. “Siempre hay cosas que no te gustan, pero es más a nivel sicológico o de personalidad, que físico. Cuando estás bien emocionalmente te gusta todo de ti.