AP
LIBERIA, MONROVIA.- Rebeldes tomaron ayer un estratégico puente en la capital de Liberia, acentuando su ofensiva pese a una promesa de tregua considerada crucial para el emplazamiento de una fuerza de paz multinacional.
Los combates obligaron a millares de familias a huir hacia otros sectores de una ciudad ya repleta de refugiados que carecen de alimentos, agua y protección de las inclemencias del tiempo.
Por otra parte, ministros de Relaciones Exteriores de África occidental que se reunieron en Dakar, Senegal, prometieron que en pocos días más serán enviados a Liberia dos batallones nigerianos, la vanguardia de una fuerza internacional de tres mil 250 efectivos que intentará traer la paz a la devastada nación.
A mediodía, rebeldes tomaron el estratégico puente Stockton, dijo el teniente general Ronald Duo. El control del puente permite a los rebeldes avanzar hacia los suburbios al norte de Monrovia y ocupar el camino al principal aeropuerto de Liberia, estrechando así el cerco a la capital.
Civiles huyeron de urbanizaciones del norte de Monrovia mientras fuerzas del gobierno trataban de frenar el avance rebelde. Mujeres agarraron las manos de sus hijos mientras escapaban hacia el este, en medio de una intensa lluvia.
Empleados de grupos de ayuda humanitaria, bloqueado su acceso a los cementerios de Monrovia debido a los combates, enterraron a víctimas de enfrentamientos en las playas.
Había también cadáveres en las calles. Eso ha impedido calcular la cifra de muertos desde la última ofensiva rebelde iniciada el sábado, aunque se calcula que ascienden a varios centenares.
La lucha ha obligado a centenares de miles de civiles a huir a Monrovia, acrecentando de manera substancial la población normal, que es de un millón de habitantes.